La Mesa de Barrios Populares de Salta hizo un relevamiento para conocer la situación de la población de los barrios populares en el contexto de la pandemia de coronavirus en Capital y San Lorenzo. Se trata de poblaciones marginadas, algunas ubicadas en zonas de riesgo que han sufrido inundaciones, a las que ya les falta el acceso a los servicios, la educación, la vivienda, la seguridad y el trabajo, y que transitan los días de aislamiento excluidos y sin que se les garantice la alimentación diaria.
El referente de la asociación civil Centro Vecinal 25 de Junio, Roman Oviedo, informó que es un relevamiento provisorio que se hizo en 46 barrios populares donde la cuarentena no está planificada. Tras ese relevamiento elaboraron un comunicado que "surgió con la intención de que los municipios y el Gobierno de la Provincia puedan tomar más de cerca la situación y trabajar en territorio". En estos barrios la situación actual es más compleja, están sin servicios regularizados, hay poblaciones que requieren reubicación porque están en zona inhabitable y peligrosa y que han afrontando inundaciones incluso en estas últimas semanas.
Oviedo planteó que la población de los barrios San Justo, Ampliación 20 de junio, Los Paraísos, que están cerca del río Arenales, debe ser reubicada, al igual que quienes viven en La Ciénaga y Virgen de Urkupiña, que están al lado del vertedero San Javier, porque corren riesgo de sufrir afectaciones en la salud. "Es una propuesta que se está haciendo a Provincia y Nación, que se creen urbanizaciones nuevas para estas familias pero no hay una política establecida", dijo.
"La gente acá vive día a día"
"La cuarentena es distinta en todos los barrios populares. La gente acá vive día a día, si no trabaja no come. Nos falta seguridad, salud, y educación. No había desde antes", sostuvo Guadalupe Flores Villanueva, referenta barrial de la zona norte alta de Villa Floresta, donde hay 250 familias viviendo en la precariedad.
En ese lugar algunas premisas del aislamiento social, preventivo y obligatorio no pueden cumplirse. Por ejemplo, la educación virtual dispuesta por los ministerios de educación de la Nación y la Provincia: Flores Villanueva indicó que hay gente que no tiene teléfono, otra que tiene el móvil pero no tiene para cargar crédito; además, no disponen de Internet y mucho menos, de computadoras. "Hay muchos niños que no pueden cumplir con las tareas, la maestras envían muchos videos y no los podemos reproducir", afirmó.
La referenta especificó que hay alrededor de 30 personas indocumentadas solo donde ella vive. "Hay mucha gente que vino de Santa Victoria Este (con población originaria y criolla) indocumentada", detalló. Precisó que en su barrio hubo personas que no se pudieron inscribir en el Ingreso Familiar de Emergencia por esa condición o por no contar con teléfonos ni computadoras e Internet.
Añadió que hay familias con niños y niñas que no perciben la AUH, y también viven allí aproximadamente 12 personas con discapacidad que tampoco perciben pensiones ni ningún ingreso
"Teníamos un comedor comunitario que ahora está cerrado. Nunca hemos recibido ayuda de Provincia o de la Municipalidad, solo teníamos donaciones de particulares, empresas y las que recaudábamos en eventos de rock en la calle Balcarce, ahora no podemos hacer eso", indicó Flores Villanueva. "La poca mercadería que tenemos la estamos dando a vecinos. Hacemos pan y lo entregamos a las familias con más necesidad", relató.
Villa Floresta es zona de riesgo. "El agua baja del cerro por cauces naturales que pasan por las casas del barrio. Cuando llueve hay casas que se inundan porque el agua pasa por éstas", detalló. También los pozos ciegos "se han llenado de agua, la mayoría de los barrios tiene problemas con pozos ciegos inundados. La Municipalidad dice que tiene un solo camión atmosférico y que no está funcionando".
Lo que no tienen además es agua potable, "hay un solo camión cisterna de Aguas del Norte que está abasteciendo pero recién el miércoles vino luego de dos semanas sin agua. No había para higienizarse, ni para tomar", contó.
Flores Villanueva dijo que en cuanto a la violencia de género "hay muchísimas situaciones. Las mujeres que se esconden de los maridos vienen y se esconden en el comedor. Normalmente la Policía no viene, no quieren responder por la zona, ni la Comisaría 4, ni la del barrio Autódromo".
Además denunció que hace un año una mujer de 65 años con retraso madurativo fue violada y que el violador quedó libre a la semana. Precisó que el abusador vive al frente del hogar de cartón de la víctima y que sigue hostigando a otras vecinas. Flores Villanueva dijo que pidieron ayuda al Polo Integral de las Mujeres antes de la cuarentena y también acompañaron a la víctima a ampliar la denuncia en la Ciudad Judicial, pero no hubo medidas de protección ni asistencia hasta el momento.
La cuarentena se cumple
Del relevamiento aún no acabado, surge que en los barrios populares de Salta capital se cumple fuertemente la cuarentena a pesar de los inconvenientes en las viviendas y de la situación familiar. Se evidencia la falta de trabajo. Las changas se suspendieron por la pandemia y la cuarentena obligatoria. Muchos comedores barriales fueron cerrados, empeorando la situación de los vecinos.
"La presencia del Gobierno nacional se realiza a través de los refuerzos en materia de AUH, Asignación para Embarazadas, refuerzo para desempleados y por ahora esto se está percibiendo como relativamente efectivo. El Gobierno de la Provincia de Salta no ha aparecido casi nunca en los barrios a donde se efectuó la consulta. Los módulos alimentarios no fueron entregados, los bolsones se discontinúan, es decir, vienen una vez y luego desaparecen", concluyeron los barriales.
En cuanto al gobierno municipal de Salta y de San Lorenzo, "en la mayoría de los barrios no se verificó la llegada de asistencia ni para los comedores ni para las familias más necesitadas", añadieron.
La Mesa de Barrios Populares sostuvo que los problemas son estructurales. "Los servicios empeoraron desde la cuarentena. Los pocos Centros de Salud en zonas de influencia han reducido su actividad. El Plan Nacional de Prevención del Embarazo carece de insumos y de asistencia. La gente vuelve a deambular por los hospitales. La población de edad se encuentra sin posibilidad de atención ni cuidado", detalló.
Además indicó que la "seguridad ha endurecido su accionar respaldada en la obligación de respetar el encierro". Flores Villanueva dijo que a un vecino lo multaron por salir a hacer una changa de cortar el pasto.
La Mesa hizo pedidos concretos: acelerar el proceso de concreción del Plan Argentina Hace, para generar puestos de trabajo reales, en obras necesarias en los barrios populares y poder enfrentar la falta de trabajo anterior al coronavirus y posterior, "que es mucho peor".
La "instrumentación real del Plan Nacional de Prevención del Embarazo no Intencional así como el Plan de Lucha Contra el Hambre"; que se ponga en práctica un plan de fortalecimiento de los comedores y merenderos. Y que, sobre todo en la pandemia, los municipios de la ciudad de Salta y de San Lorenzo atiendan las "situaciones graves de discapacidad" y a la población de la tercera edad.