Unas 16,6 millones de personas perdieron su trabajo en Estados Unidos desde que el gobierno endureció las medidas para enfrentar el coronavirus. El dato surge de la cantidad de subsidios por desempleo solicitados al Estado en los últimos 21 días. Sólo durante la semana pasada 6,6 millones de personas solicitaron el subsidio. Estudios apartidarios encargados por el Congreso estiman que el desempleo podría escalar hasta el 12 por ciento al final del segundo trimestre del año, y que la economía entrará en recesión. En paralelo, el país alcanzó los 450,525 casos positivos de Covid-19, en tanto que el número de muertos escaló a 15.896. Nueva York, la ciudad más afectada , tuvo un nuevo récord de muertes. Sin embargo cayó el número de personas hospitalizadas.
Números impensados
La cifra semanal de peticiones del subsidio de desempleo fue levente menor que los 6,867 millones de la semana anterior, según anunció el Departamento de Trabajo. Este número sin precedentes en la historia de Estados Unidos superó las expectativas de los analistas, que habían calculado la pérdida de unos 5,5 millones de puestos de trabajo. El promedio de solicitudes tomando las últimas cuatro semanas, subió al nivel de 4,2 millones. En la semana que concluyó el 28 de marzo 7,4 millones de personas estaban recibiendo prestaciones por desempleo, cuando la anterior sólo 4,4 millones lo estaban cobraron.
Sin embargo, el dato sobre las solicitudes por desempleo no refleja toda la realidad del mercado laboral. Los trabajadores independientes e informales, que no pueden acceder a estos beneficios bajo las reglas vigentes, se queda por fuera de los registros oficiales. Con casi el 75 por ciento de la población estadounidense confinada en sus hogares, los analistas esperan que continúen aumentando las solicitudes. La perspectiva es que pasen meses antes de que se reanuden las actividades económicas normales. La semana pasada el Gobierno informó de un salto del índice de desempleo al 4,4 por ciento en marzo, respecto al 3,5 de febrero. Los datos son peores para los hispanos, con un índice de desempleo del 6 por ciento, en tanto que para los afroamericanos la cifra llega al 6,7 por ciento. Las filas de los desempleados parecen haber crecido más que el récord anterior de 15,3 millones de desocupados durante la recesión de 2007-2009.
Intervención del Banco Central (Fed)
A poco de conocerse la actualización del número de desocupados, la Reserva Federal (Fed) anunció un nuevo programa de préstamos. El mismo contempla otorgar 2.300 millones de dólares para respaldar a las pequeñas y medianas empresas, y a los gobiernos estatales y locales. Los préstamos irán destinados a empresas con hasta 10.000 empleados y menos de 2.500 millones de ingresos en 2019. Además, permitirán el aplazamiento de los pagos de intereses y de capital por un año. Otros 500.000 millones de dólares se destinarán a respaldar las maltrechas finanzas de los gobierno locales y estatales.
En la primera semana de abril, las solicitudes del seguro de paro alcanzaron números sin precedentes en California, Georgia, Michigan y Nueva York. California, el mayor estado del país, recibió en las últimas tres semanas más de 2,5 millones de pedidos de ayudas por desempleo. Pero las cifras reales podrían ser aún más altas dado que varios estados tuvieron dificultades para procesar los trámites. También se habían rechazado temporalmente las solicitudes de trabajadores que no hubieran reunido los requisitos para recibir el subsidio bajo las reglas vigentes antes de la emergencia.
Para contrarrestar los efectos de esta pandemia, hace algunas semanas el Congreso aprobó, y el presidente Donald Trump promulgó, el mayor paquete de estímulo fiscal de la historia, por valor de más de dos billones de dólares. Esto incluyó la ampliación de la cobertura por desempleo que llegará por primera vez a varios sectores, entre ellos los conductores de vehículos para Uber y otras empresas similares. Asimismo, incluye la transferencia directa de efectivo a los hogares, así como fondos multimillonarios para subsidiar a las pequeñas y medianas empresas.
Nueva York sigue dando la pelea
La cifra de muertos por covid-19 continúa subiendo en el estado de Nueva York que en las últimas 24 horas alcanzó un nuevo récord de 799 muertos. Desde mediados de marzo un total de 7.067 personas perdieron la vida por el coronavirus y llegan a más de 160 mil los infectados en todo el Estado. El gobernador demócrata, Andrew Cuomo recordó que durante los atentados terroristas del 11 de septiembre murieron 2.753 neoyorquinos. Solo en la ciudad de Nueva York se registraron 4.571 muertes por el virus, según cifras de la Universidad Johns Hopkins. La mayoría de ellos son inmigrantes hispanos y personas negras, las más pobres y vulnerables, según las autoridades.
Pero hay también señales alentadoras. En el último día solo 200 nuevos pacientes con coronavirus fueron ingresados en hospitales, lo cual eleva el total de personas internadas a unas 18.000, informó el gobernador. "Este es el menor número que hemos tenido desde que empezó esta pesadilla", sostuvo Cuomo. La admisión en cuidados intensivos también está bajando, y en las últimas 24 horas 84 personas fueron ingresadas. "No podemos asumir que porque estamos viendo algunas señales positivas esto acabará pronto o que no habrán olas adicionales", alertó el gobernador demócrata. Estados Unidos es el país del mundo con más casos de coronavirus, superando a Italia y España juntos.