Martín Pérgola, integrante de Jóvenes Científicos Precarizados y uno de los asistentes a la mesa redonda sobre “Cannabis sapiens”, organizada por el investigador Marcelo Rubinstein en el Centro Cultural de la Ciencia, relató a Página/12 que después de que interviniera el primer panelista, fue invitado a participar del debate el ministro de Ciencia y Tecnología, Lino Barañao, quien había llegado al lugar acompañado por el titular del Conicet, Alejandro Ceccato. 

Barañao, quien tuvo que retirarse poco después en medio de abucheos y silbidos, defendió su gestión y reivindicó "la idea de tener una planta estable de 450 investigadores por año en el Conicet, lo cual pone un tope a los ingresos”, que dependerán, entonces, de la cantidad de jubilaciones que se produzcan en el mismo período. Pérgola recordó, también, que el promedio de los últimos años era de 800 vacantes anuales, por lo cual el recorte representa alrededor del 50 por ciento de la planta actual.

El ministro, denunció Pérgolas, también defendió el plan estratégico de su área. “Son planes poco claro, muy difusos, que han perjudicado a las ciencias duras. Y son más proclives al mercado que a la investigación. Se le dio prioridad a algunas líneas de investigación en forma poco específica”, agregó Pérgola, quien puso como ejemplo la prioridad otorgada a la investigación en epidemiología, pero sin delimitar sus objetivos. En el área de Historia, por ejemplo, solo pudieron ingresar 15 historiadores al Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas.

Cuando Barañao terminó su exposición se oyeron algunos tibios aplausos pero fueron apagados enseguida por silbidos y abucheos. “Se tuvo que ir, y la charla siguió, pero el clima se había cortado por completo”, lamentó Pérgola.

El recorte de las becas anunciado a fines del año pasado, que afectaba a más de 600 investigadores, puso en alerta a toda la comunidad científica, que en vísperas de Navidad tomó el edificio del CONICET, hasta que su directorio se comprometió a mantener el mismo número de becas en 2017 y a convocar a una mesa de seguimiento durante el año en curso.