El primer ministro británico Boris Johnson salió de terapia intensiva y proseguirá su recuperación en el hospital St Thomas de Londres. El premier, de 55 años, permanecía internado desde el domingo. Desde el gobierno desmintieron que Johnson tuviera neumonía y también informaron que no necesitó respirador. Por su parte, Dominic Raab, el hombre encargado de reemplazarlo en el Ejecutivo, estudia prolongar el aislamiento obligatorio. El Reino Unido tiene 65.077 casos positivos de Covid-19, en tanto que el número de muertes llegó a 7.978.
Johnson anunció que tenía coronavirus el 27 de marzo e inmediatamente se puso en cuarentena en la residencia oficial, llamada Downing Street. Diez días después siguió teniendo síntomas, entre ellos fiebre. Por lo que sus médicos decidieron ingresarlo el domingo en St Thomas para realizarle unas pruebas. Al día siguiente su estado se agravó y tuvo que ser trasladado a la UCI, que ahora deja atrás. "El primer ministro ha sido trasladado esta tarde de los cuidados intensivos al pabellón, donde recibirá una estrecha vigilancia durante la fase inicial de su recuperación", afirmó un portavoz de Downing Street.
Si se recupera rápidamente podría incluso participar en la próxima decisión crucial que debe tomar el Ejecutivo: prolongar el confinamiento. Johnson fue muy criticado por haber tomado medidas de distanciamiento social más tarde que sus principales vecinos europeos. La estrategia inicial estaba orientada a lograr inmunidad colectiva. Pero el 23 de marzo ordenó al país quedarse en su casa. El premier conservador dijo que se trataba de un medida excepcional para circunstancias excepcionales, un solemne discurso televisado, prometiendo que sería revisada al cabo de tres semanas. El plazo vence el lunes pero la decisión llegará más tarde. "Al final de la próxima semana", anunció Raab.
El premier interino tambíén presidió el comité gubernamental de respuesta a la crisis, conocido como COBRA. El organismo analizó los datos disponibles para determinar cuánto más deberían durar las medidas de aislamiento. En las últimas 24 horas murieron 881 personas por Covid-19 en el Reino Unido. La cantidad de contagios confirmados también continúa avanzando: se detectaron 4.344 nuevos infectados durante la jornada del jueves. "Las medidas van a tener que mantenerse hasta que tengamos pruebas que muestren claramente que hemos pasado el pico", explicó el ministro. El confinamiento en el Reino Unido es menos estricto que en otras naciones. Sus habitantes están autorizados a salir para ir a trabajar -en caso de que sea absolutamente necesario-, hacer compras, ir al médico y hacer ejercicio físico, algo prohibido por ejemplo en España. El ejercicio físico teóricamente está limitado a una vez por día. A diferencia de Francia, no requiere llevar un justificativo escrito, no hay control efectivo de la policía y los parques están abarrotados de gente haciendo footing.
Con la llegada de las vacaciones de Pascua y el buen tiempo, las autoridades temen que proliferen viajes y picnics. Desde el jueves el gobierno empezó a multiplicar los mensajes insistiendo en que la gente se "quede en casa". "Lo siento mucho", dijo Raab, pidiendo a los británicos que en estas fechas se abstengan de visitar a la familia. El ministro se mostró convencido de que el esfuerzo va a dar resultados. "Tras todos los sacrificios hechos por tanta gente, no lo arruinemos ahora. Esto es un esfuerzo de equipo", subrayó el funcionario.