Entre las penurias del día a día, hay soluciones, oportunidades, historietas. Habrá que tomarlo de esta manera y en la medida de lo posible. Si bien con el humor editorial apesadumbrado y proyectos congelados, los principales sellos de la ciudad abren parte de su catálogo y comparten. Por un lado, socializan un material de valía, por el otro permiten la disponibilidad de algunos títulos que ya faltaban o estaban agotados.

De esta manera, el sello Términus pone a disposición en su fanpage de Facebook (@terminuslibros) la totalidad de los 12 números de su revista, la antología que iniciaran en 2013. Revista Términus alumbró un proyecto propio en sintonía con una época de renovación local para la historieta. Nuevos valores tuvieron allí primeras páginas fundamentales, junto a otros de trayectoria. Entre los nombres pioneros están Bruno Chiroleu, Gastón Flores y Maximiliano Bartomucci. Y entre la nómina de talentos que reunirán sus páginas -a lo largo de tres años de historia- figuran Germán Peralta Carrasoni, Juan Manuel Frigeri, Fede Sartori, Fernando Nicolás Baldó, Ariel Grichener, Damián Couceiro, Diego Simone, Luciano Sarasino, Sebastián Cabrol, Diego Agrimbau, Dante Ginevra, Nicolás Brondo, Rodrigo Luján, y siguen las firmas.

En Términus muchos de los artistas fueron de la ciudad, otros del país todo y también de más allá. Como ejemplo, lo prueba la inclusión en sus páginas de la notable RIP Van Hellsing, realizada para el mercado italiano por la dupla en guion de Enrique Barreiro y Hernán Ferrúa junto al dibujo de Enri Santana. Muchos de los talentos de Términus hoy trabajan en el mercado internacional, y los 12 números constituyen uno de los capítulos más importantes en la historia de las revistas de historieta rosarinas.

El otro sello que cultivó antología propia es Rabdomantes, con revista Quimera. Lo notable es que el sello ha puesto a disposición (@rabdomantesediciones) los cinco números de la publicación junto a tres títulos de la colección “Reencuentro”, y la edición integral de El Hombre Primordial, de la dupla Mantella/Erramouspe. En el caso de Quimera, su trayectoria –entre abril 2014 y febrero 2017- reunió nombres como los de Nicolás Zuliani, Zorro Ré, Mauro Bueno, Esteban Tolj, Pablo Ayala, OsoZeth, Ziul Mitomante. Fue la piedra basal del proyecto editorial que dirige César Libardi. A partir de allí, el catálogo creció de modo diverso, y es una buena muestra lo que ahora puede consultarse.

Los sellos por un lado, socializan un material de valía, por el otro permiten la disponibilidad de algunos títulos que ya faltaban

Reunidos bajo el rótulo “Reencuentro”, figuran (Bang)Kok , Cándido, y Orgasmatron. (Bang)Kok es un lejano trabajo del local Renzo Podestá, publicado originalmente en 2005 por el sello cordobés Llanto de Mudo. Fue recuperado por Rabdomantes y es fundamental si lo que se quiere es tener un acercamiento mayor a la obra de uno de los dibujantes fundamentales del panorama actual. Otro tanto puede decirse de Cándido, un western sórdido y sorprendente, realizado por Javier Rovella, el autor del célebre Dante Elefante. Por su parte, Orgasmatron es una pieza maestra, de ciencia ficción sexual, del pintor y animador Julio Azamor. Tanto Orgasmatron como Cándido fueron publicadas originalmente en los ’90 en el legendario fanzine porteño Catzole, por el cual Libardi siente una merecida admiración.

A todo esto, el mismo sello agrega la posibilidad de leer esa joya de brillo justificado que es El Hombre Primordial, con guión de Mauro Mantella y dibujos de Germán Erramouspe. Desde la veta de los superhérores, El Hombre Primordial indaga mucho más y toca un fondo difícil, complejo, en donde anuda preocupaciones y obsesiones personales y sociales, eso que tan bien sabe hacer Mantella en sus historias, de un acento cercano al inglés Alan Moore pero de vertiente autónoma. El Hombre Primordial es una de las obras insoslayables de la historieta argentina, publicada originalmente entre 2005 y 2006 en la revista porteña Bastión Unlimited.

La tercera oferta la abre el Colectivo Editorial Big Sur (@colectivoeditorialBS), con una “Cuarentena Pack” que incluye, por cortesía de Szama Ediciones, el casi agotado A tu rojo ruta, del platense Mariano Taibo. La vía virtual no podrá reemplazar el placer de tener el libro en las manos, dado su diseño horizontal y trabajo de color. Pero no importa: no hay que dejar de leer el desempeño gráfico de Taibo, con dos colores y el uso de textura símil offset. Un diseño visual que encuentra vínculo con ¿la obra maestra? del ya mencionado Renzo Podestá: es una noticia formidable saber que El Aneurisma del Chico Punk, en sus dos volúmenes, también figura para su descarga. Si hay que elegir qué leer, sí o sí, ésta es una de esas obras.

Como no puede ser de otro modo, Podestá se las ingenia para seguir en lo que sigue, ya que entre lo que figura destaca el primer capítulo del esperado Ichabod Jones (con guión de Russell Nohelty, libro que aparecerá no bien terminen estos días de aislamiento, y será el despunte del sello Multiversal, con dirección de Mariano Abrach. Y vale agregar que el pack de Big Sur suma también los títulos M.O.N.51: Infierno 2000, de Fernando Calvi (Editorial La Pinta), y En un Parpadeo, de Mariela Viglietti (Le Noise).