"Hay que evitar que la excepcionalidad de márgenes para la discrecionalidad y la arbitrariedad", dice Sabina Frederic en diálogo con Página/12. La ministra de Seguridad de la Nación Frederic se refiere a la proliferación de denuncias de casos de violencia institucional que surgieron, especialmente en los barriospopulares, tras el decreto de aislamiento social obligatorio. En este sentido, adelanta a este diario el proyecto de consensuar un protocolo que regule el accionar de las fuerzas de seguridad. De cara al fin de semana largo de Semana Santa, describe los controles que se piensan implementar y, en una evaluación del cumplimiento de la cuarentena, es optimista respecto a la evolución que observa en la circulación de personas y vehículos. También se refiere a las tareas de "ciberpatrullaje" que las fuerzas federales realizan sobres las redes sociales, diferenciando estas tareas de las de "ciberespionaje".
- ¿En qué consisten específicamente las tareas de ciberpatrullaje que llevan a cabo las fuerzas federal en Internet?
- El ciberpatrullaje se hace desde que los delitos contra la ciberseguridad son moneda corriente. En esta circunstancia, lo estamos usando para prevenir la posible comisión de delitos, especialmente el de los saqueos. No es ciberespionaje. Lo que hacemos es navegar en el espacio público cibernético -sólo el público- haciendo búsquedas utilizando palabras claves como "saqueo" o el nombre de supermercados y localidades, y así detectar si hubo denuncias realizadas en las redes o personas que hayan estado convocando a través de las redes sociales para acciones de este tipo. Pero en ningún momento hacemos auscultación o un análisis invasivo de personas, solo utilizamos categorías. En el caso que se detecte que una persona haya estado amenazando o que haya indicios de que esa persona está por cometer un ilícito, se da intervención a la Justicia.
Encontramos una denuncia hace unos días que sostenía que en el Hospital Posadas había dos pisos ocupados por personas enfermas con COVID 19 y que el Estado estaba ocultando información. Ahí se le dio intervención a la Justicia, intervino la Policía Federal Argentina y se realizó una investigación para analizar si era cierto, en primer lugar, y después para determinar algún tipo de sanción sobre las personas que difunden información falsa que tiende a generar pánico en la población.
- Mencionó que se llevaría a cabo un protocolo para reglamentar este tipo de actividades, ¿en qué consiste?
- La semana que viene vamos a poner un borrador a disposición para someterlo a consideración de especialistas y a la Comisión de Seguridad de Diputados, en el caso de que estén interesados, y de organizaciones que se ocupan de estos temas. El objetivo es consensuar y dejar claros los límites y que no sea sólo lo que yo digo, sino que esté escrito.
- ¿Cómo se hace para marcar los límites del accionar de las fuerzas policiales en un estado de excepción y emergencia como el actual?
- Tengo la misma preocupación que tienen muchos en este contexto, lo que hay que hacer es evitar que la excepcionalidad de márgenes para la discrecionalidad y la arbitrariedad. Es cierto que tenemos decretos que, en situaciones de excepcionalidad, obligan a las fuerzas de Seguridad y a la Justicia a tomar determinadas sanciones que son inusuales, y con las fuerzas de seguridad sucede que así a veces se abren márgenes para la discrecionalidad. Nosotros tenemos un fuerte control de las fuerzas federales y aun así tenemos diez denuncias por violencia institucional. Las provincias, además, tienen bastantes denuncias; en especial Chubut, que es la que más casos públicos tiene.
-Las organizaciones sociales denuncian que, con la cuarentena, se multiplicaron los abusos policiales en los barrios populares. ¿Qué medidas va a tomar el Ministerio de Seguridad?
-Nosotros tenemos jurisdicción sobre las fuerzas federales, y lo que estamos haciendo es darle aviso a las otras jurisdicciones de que estamos atentos a los casos de violencia institucional. Y estamos dando el ejemplo de qué hacer cuando sucedan: tomar medidas rápidas sobre el personal, ya sea sancionarlos, pasarlos a disponibilidad o darle intervención a la Justicia. Podemos hacer un seguimiento, pero no podemos hacer más, no podemos sancionar a un policía de la provincia de Chubut porque no tenemos competencia sobre las provincias.
Lo que hicimos también fue realizar una sesión extraordinaria del Consejo de Seguridad Interior el 1 de abril, donde le manifestamos a los ministros y ministras de Seguridad provinciales que fuesen claros en sus órdenes porque los vacíos que permiten abrir esas zonas de arbitrariedad pueden ser completados con conducción política. Y quiero dejar en claro que eso no implica convertir a los policías en el chivo expiatorio de las irresponsabilidades de la conducción política, sino al revés: debemos convertirnos en responsables de las acciones de quienes nos dependen, no hay que sólo echarle la culpa a la policía de lo que hace mal, sino que hay que darle todas las herramientas para que lo hagan lo mejor posible.
- Está por cumplirse la tercera semana del aislamiento social y el Presidente ya declaró que se va a extender. ¿Cómo se hace para sostener durante tanto tiempo el acatamiento a la cuarentena?
- Esa es una tarea que tenemos muchos ministros, pero creo que el Presidente es el que mejor la ejecuta porque sus mensajes son claros, transmite tranquilidad y la gente lo escucha. La oposición, además, ha respondido muy bien políticamente. Me parece que entre todos los gobernantes y ministros tenemos que hacer el mayor esfuerzo para llevar tranquilidad y confianza a la gente, pero también hay que agradecerles por el acatamiento. Hoy estuve viajando en helicóptero con el ministro del Interior (Wado de Pedro) recorriendo la ruta 2 y los controles de las rutas 8 y 9, y vi muy poca circulación. En el peaje de Hudson, que conecta con la ruta 2, nos comentaron que el año pasado, por Semana Santa, hubo una circulación de 91 mil vehículos. Hoy hubo cinco mil. Se nota que hay un cumplimiento muy grande de la cuarentena. No sólo hay que pedirle mayores esfuerzos a la población, el Estado debe seguir garantizando recursos para los sectores que más lo necesitan para que puedan atravesar la situación lo mejor posible.
- ¿Cuántas detenciones hubo desde que comenzó la cuarentena?
- Hasta hoy (jueves) se han registrado 31 mil personas infractoras, pero eso no quiere decir que estén presas. Las fuerzas provinciales detuvieron cerca de 200 personas, pero sólo por unas horas. Hubo, además, 2900 vehículos secuestrados en todo el país por las fuerzas federales. Si bien hoy hay más personas circulando, eso se debe a que aumentaron las excepciones al aislamiento. Pero de todos modos se mantiene la proporción entre personas controlas y personas infractoras (es decir que no llevan ninguna documentación respaldatoria), que es del 2,6 por ciento.
- ¿Qué medidas se van a adoptar de cara a Semana Santa para evitar que circule gente?
- Este fin de semana largo hemos articulado con el Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, que va a estar controlando la Interbalnearia y los accesos a algunas ciudades costeras. Nosotros vamos a estar controlando el acceso a Mar del Plata y Pinamar con la Policía Federal, y mantenemos los controles de las rutas 8 y 9. De todas maneras, hemos observado una merma considerable de autos cuando lo comparamos con el primer fin de semana largo que tuvimos durante la cuarentena. El sábado 21, el primer día de la cuarentena, empezaba el fin de semana largo que duraba hasta el 24, y ese día por el peaje de Hudson circularon 9 mil vehículos. Hoy jueves circularon solo cinco mil. Eso muestra que la gente está tomando conciencia. Bueno, eso y el hecho que secuestramos varios autos, eso también le dio una idea a la gente de que la cosa es en serio.