Los efectos socioeconómicos de la pandemia ya son visibles y cercanos. Y esta vez golpean en el sector gastronómico. Ayer se conoció que un bar concesionado en la zona de rambla Catalunya despidió a 14 empleados, y los tres locales de una conocida franquicia del rubro desvincularon a otros ocho trabajadores. Eso, a pesar de la vigencia del decreto de necesidad y urgencia 320/20, que prohíbe y desautoriza los despidos durante abril y mayo. El sindicato responsabilizó a la municipalidad de Rosario por consentir "la explotación de trabajadores" en un comercio concesionado. También denunció a las cadenas de comidas rápidas por abonar menos de lo debido a sus empleados. 

En el paseo Rambla Catalunya funciona el bar Paradiso, adjudicado por Empresa del estado Municipal Costanera a Lorena Andrea Veyrand. Desde allí partieron el jueves telegramas de despido para catorce empleados que se desempeñan allí.

La situación motivó al concejal Carlos Cardozo (Juntos por el Cambio) a llevar el problema al parlamento local y exigir la intervención del Ejecutivo. "Los trabajadores no perciben sus salarios y la titular de la concesión, por testimonio de los empleados, habría manifestado su intención de no abonar salarios hasta tanto se mantenga la cuarentena. En términos confusos, la titular de la concesión habría convocado a los trabajadores a prestar servicios para delivery de alimentos, pero con la condición de no abonar los salarios de manera completa, según la palabra de los propios empleados. En estos momentos de zozobra global no es razonable la medida tomada por la concesionaria", postuló el edil. Cardozo pide al Ejecutivo municipal que "intervenga en el conflicto y priorice la estabilidad laboral de los empleados".

El secretario general del Sindicato de Trabajadores Gastronómicos Rosario, Sergio Recúpero, señaló que la entidad "viene denunciado hace años el tema de las concesiones muncipales, la ilegalidad en la que se encuentra la mayoría". "Lo único que han hecho, la gestión actual y la anterior, es favorecer la continuidad de la explotación a los trabajadores. Costanera Rosario concesionó a tontas y locas los bares de la Florida para sacarse al personal de encima, y así surgen los problemas", disparó.

El gremio gastronómico asume que la recesión causada por la pandemia depare la pérdida del 50 por ciento de los puestos laborales en la ciudad. “Con el aislamiento obligatorio, el sector gastronómico es uno de los más golpeados. Creemos que la mitad de los puestos de trabajo pueden llegar a perderse”, se alarmó. "La actividad ya venía con un respirador artificial y esta situación termina por sacárselo”, lamentó.

Al margen del sindicato, trabajadores de locales de la marca El Club de la Milanesa divulgaron ayer el despido de ocho de ellos. Esa franquicia posee negocios en el Paseo Pellegrini, en Pichincha y en Puerto Norte. Uno de los cesanteados es el cadete Alexis Palmero, quien contó que nadie allí cobró el sueldo de marzo, pero además esta semana fueron despedidos por vía telefónica. "Fue todo de palabra, dijeron que es un recorte de personal por lo que pasa con el virus", contó el joven.  

El panorama se completa con la presentación al Ministerio de Trabajo que hizo el Sindicato de Confiteros porque las multinacionales Mc Donald's y Burger King liquidaron haberes de la segunda quincena de marzo con importes "muy inferiores" a lo que corresponde. "Y eso a pesar del decreto 297/20 que ratifica el derecho de los trabajadores a cobrar la totalidad de sus haberes", marcó el referente local del gremio, Jorge Juárez.