¿Cómo resistirá Hollywood la parálisis mundial de estos días de pandemia? A fines de la semana pasada, representantes de la Asociación de Dueños de Salas de Estados Unidos (NATO, por su siglas en inglés) tuvieron un lapsus de optimismo casi utópico y sostuvieron al portal Indiewire que los complejos podrían volver a encender sus proyectores a fines de mayo o principios de junio, aunque aplicando la distancia social, es decir, dejando un par de butacas libres entre cada una ocupada. Sin embargo, y aun si las condiciones epidemiológicas permitieran la reapertura, los analistas de la industria audiovisual ya dan por descontado que la temporada de verano boreal –el invierno austral– está prácticamente perdida en términos de negocios. Sucede que los principales estudios ya anunciaron la postergación de gran parte de los estrenos a priori más taquilleros, desatando una ola de cambios en el calendario que llega incluso hasta 2022.
A principios de marzo, los productores de No Time to Die, la 25° película del Agente 007, actuaron más rápido que muchos gobiernos y pasaron el estreno de abril a mediados de noviembre. Desde entonces los tanques pautados originalmente para marzo y abril cayeron como fichas de dominó. La versión live action de Mulan, que iba a verse desde fines del mes pasado y con la que Disney pensaba reventar las salas chinas debido a que su historia está ambientada en ese país, quedó flotando en la nebulosa durante varias semanas, hasta que hace unos días se confirmó al 24 de julio como nueva fecha de lanzamiento. Por esos días de marzo también debía verse Un lugar en silencio 2, que finalmente llegará en septiembre. Más radical fue la decisión de los ejecutivos de Universal a la hora de patear hasta abril de 2021 la novena entrega de Rápidos y furiosos, cuyo lanzamiento original era el 22 de mayo, en vísperas del Memorial Day norteamericano, una de los fines de semana de mayor ganancia para las salas.
Un invierno distinto
Si el presidente Alberto Fernández dice en cuanta entrevista le hacen que “las clases pueden esperar”, ¿qué queda para los cines y los teatros? Resulta imposible vaticinar una fecha de reapertura de las salas en un contexto dinámico e impredecible en el que las actividades relacionadas con el entretenimiento están muy lejos de ser prioritarias. Pero incluso en el hipotético caso de que los cines puedan operar aunque sea con la mitad de la capacidad de espectadores de aquí a un par de meses, el siempre redituable periodo de vacaciones de invierno tendrá que enfrentar la ausencia de los tanques infantiles más importantes. La principal apuesta era Minions 2: El origen de Gru, que no llegó a concluir su proceso de posproducción en Francia y, por lo tanto, se verá recién durante el invierno del año que viene. Por su parte, Jungle Cruise, el film de aventuras protagonizado por Dwayne “The Rock” Johnson y Emily Blunt, pasó del 24 de julio al 20 del mismo mes pero de 2021, mientras que la esperada secuela de Los cazafantasmas, titulada El legado, fue postergada del 10/7 al 5 de marzo de 2021. El menú de cine familiar invernal iba a completarse con Free Guy, que debía verse desde el 3 de julio pero llegará recién en diciembre.
Las postergaciones invernales también alcanzaron las propuestas pensadas para un público adulto. El 12 de junio debían estrenarse la remake de Candyman y Greyhound, un film bélico con Tom Hanks, pero la primera llegará en septiembre y la segunda todavía no tiene fecha. El actor de Forrest Gump no es el único Tom que deberá esperar, ya que la secuela de Top Gun, en la que Tom Cruise vuelve a interpretar al piloto Pete “Maverick” Mitchell, desembarcará en las salas en diciembre y no a fines de junio, tal como estaba pautado. Para julio se esperaba el estreno de The French Dispatch, de Wes Anderson, que ahora llegaría el 16 de octubre. Queda pendiente la decisión de Disney sobre Soul, lo nuevo de Pixar, que al cierre de esta nota se mantenía para mediados de junio.
Superhéroes alterados
Disney invirtió durante 2019 más de 27 mil millones de dólares en la generación de contenidos para todas sus unidades de negocios audiovisuales, entre ellas la flamante plataforma de streaming Disney+, que llegó a Estados Unidos a fines del año pasado con la idea de expandirse por el resto del mundo en 2020. Un plan que hasta ahora viene manteniéndose, tal como demuestra su lanzamiento en España a fines de marzo, en pleno pico de la pandemia y cuando la Unión Europea alertaba sobre el potencial peligro de hacer colapsar internet por el aumento de consumo de videos. El estudio de Mickey se tomó un buen tiempo para redefinir la hoja de ruta debido a que varios de sus proyectos están vinculados a los superhéroes de Marvel. Y como cada uno de esos proyectos es parte de un relato mayor, con historias y personajes de distintas películas y series que se vinculan entre sí, un parate prolongado implica automáticamente el reacomodamiento de gran parte del calendario marveliano y, por ende, de un plan operativo diagramado hasta 2022.
En ese contexto, era fundamental que Black Widow se estrenara el 30 de abril porque marca el inicio de la Fase 4 del Universo Cinematográfico de Marvel (UCM), que continuaría durante 2020 con varias series de Disney+ y otras tantas películas en salas. Por eso el estudio demoró una decisión que desde hace semanas parecía inevitable: la postergación del primer protagónico en solitario del personaje de Scarlett Johansson hasta el 6 de noviembre. Así, 2020 será el primer año con un único título de Marvel en cartel desde 2013, cuando se estrenó solamente Iron Man 3, mientras que los 16 meses que separarán esta nueva fecha del último lanzamiento del UCM, Spiderman: Lejos de casa, significarán la mayor brecha temporal entre dos films de la compañía desde El increíble Hulk (junio de 2008) e Iron Man 2 (mayo de 2010).
El 6/11 estaba reservado para The Eternals, que pasó para el 12 de febrero y obligó al retraso de la película con encapotados pautada para ese día, Shang-Chi and the Legend of the Ten Rings, cuya fecha ahora es el 7 de mayo de 2021. Esto hace que Doctor Strange in the Multiverse of Madness, pautada para ese día de mayo, pase al 5 de noviembre, jornada que antes del Coronavirus pertenecía a Thor: Love and Thunder. La flamante aventura del hombre del martillo se vería en febrero de 2022, mientras que Capitana Marvel 2, que no forma parte de la Fase 4, se estrenaría en julio de ese año. La grilla de series también sufrió modificaciones, aunque no tan profundas. The Falcon and the Winter Soldier y WandaVision podrían llegar en 2020 ya que concluyeron sus rodajes antes del inicio de la pandemia, mientras que para Loki y la animada What If…? habrá que esperar hasta 2021. Hawkeye, Ms. Marvel, She-Hulk y Moon Knight se verán recién en 2022.
Pero si de demoras se trata, lo de Los nuevos mutantes debe ser un récord. Pautado originalmente para abril de 2018, el nuevo spin-off de saga X-Men fue postergado tres veces hasta que, finalmente, se eligió al 3 de abril como fecha. Pero la pandemia le asestó otra cachetada, poniéndola a la espera de un nuevo plan por parte de Disney, que con la compra de Fox sumó la franquicia de los mutantes a sus productos.
Desde la vereda de enfrente, Warner también movió sus piezas. La más importante fue Mujer Maravilla 1984, la precuela protagonizada por Gal Gadot en la piel de la heroína de DC Comics, que llegaría a las salas el 14 de agosto en lugar del 5 de junio. Es de esperar que de aquí adelante anuncien nuevos cambios debido a que todos los rodajes están detenidos. Entre ellos el de la nueva Batman, que tendrá a Robert Pattinson en la piel del Hombre Murciélago y a Matt Reeves en la silla del director. Según contó el responsable de Cloverfield y El planeta de los simios al diario británico The Guardian, hasta el parate habían filmado “un cuarto de la película”. “Ahora estoy viendo y analizando el material para pensar en lo que viene”, dijo.
Cambio de pantallas
En la industria cinematográfica existe lo que se llama “ventana de exhibición”, es decir, un periodo de exclusividad para la explotación comercial de una película en salas antes de que pueda verse en otros formatos. Los cines estadounidenses se mostraron históricamente inflexibles a achicar ese periodo más allá de los tres meses, razón fundamental de la pelea del sector con Netflix. Pero el Coronavirus cambió radicalmente el panorama, por lo que varias películas que estaban en cartel a principios del mes pasado ya están disponibles para su visionado en pantallas hogareñas. Es el caso
Unidos, de Pixar, que luego de lanzarse mundialmente la primera semana de marzo fue subida a Disney+ hace diez días, y de Frozen II, que si bien cumplió la ventana de 90 días llegó a la plataforma antes de lo pautado originalmente.
Esa misma línea siguieron tanto los principales estudios de Hollywood como otros más pequeños e independientes. Al momento de declararse la pandemia, Universal tenía en cartel dos títulos de la productora especializada en cine de terror Blumhouse, El hombre invisible (que tuvo un paso fugaz por las salas argentinas) y The Hunt. Ambos estuvieron disponibles para su alquiler on demand pocos días después del cierre de los complejos de exhibición. Lo mismo ocurrió con Bloodshot y Sonic, de Sony, y con The Way Back, Just Mercy y Aves de presa, de Warner. Si bien habían llegado a estrenarse en Estados Unidos, y en algunos casos ya habían bajado de cartel, los cinco títulos arribaron al sistema de alquiler antes de los 90 días.
Por otro lado, Emma, la nueva adaptación de la famosa novela de Jane Austen, había llegado a las pantallas grandes de Estados Unidos el 6 de marzo, y para finales de ese mes ya podía encontrarse en internet, al igual que Never Rarely Sometimes Always y el film de terror Brahms: The Boy II.
Pero, ¿qué pasa con aquellas películas con fecha de estreno en abril y mayo que no son prioritarias para los estudios? Varias de ellas no se verán en salas y pasarán directamente al mercado del streaming y los sistemas on-demand. El caso más significativo es el de Artemis Fowl, la adaptación de un libro para jóvenes adultos a cargo del británico Kenneth Branagh, que Disney presentaría en cines el 29 de mayo pero finalmente se verá directamente en Disney+. Una decisión similar tomó Universal con Trolls: World Tour, la secuela del film de 2016, cuyo lanzamiento estaba pautado para el 10 de abril pero en Estados Unidos ya está disponible para su alquiler.