Un insólito episodio tuvo lugar esta Semana Santa en el barrio de Nordelta, donde el cura de la zona fue visto bendiciendo distintas viviendas en una camioneta 4x4, tras enviar una carta por mail a los vecinos solicitando donaciones para la parroquia mediante transferencias bancarias.
Mediante un escrito enviado vía mail a los vecinos de Nordelta, Damián Rodríguez Alcobendas, sacerdote de la parroquia Sagrada Familia, explicó cómo iba a ser el procedimiento para bendecir los hogares: “La idea es pasar como sacerdote, ya que estoy autorizado a circular por todos los barrios con una camioneta. Iría parado en la caja (perdonen si parece un poco ridículo) para poder bendecir desde allí a las casas y a la vez respetar las normas sanitarias de distancia y aislamiento”.
Luego, precisó que solamente recibirían la bendición los hogares que hayan preparado un “pequeño altar” en su puerta y que tengan a la familia reunida. “En ese altar/mesita sugiero poner un mantel y, si es posible, una imagen de la Virgen y tener ramos. Estos no necesitan ser de olivos obligatoriamente, sino los que puedan. Así bendeciré solo a esas casas que, a través de este gesto, me lo estén pidiendo. Me parece que debo respetar a los que piensen distinto por el motivo que sea y no desean esa bendición”, expresó el párroco.
A su vez, ante la imposibilidad de recibir aportes a través de la colecta de las misas, solicitó donaciones mediante código QR o transferencia bancaria “para poder seguir enfrentando los gastos tales como sueldos, luz, mantenimiento y aportes a otras parroquias más humildes”.
Según señalaron los vecinos, Alcobendas recorrió los barrios La Mansa, Lago Escondido, Islas de Golf y Santa Bárbara, y solo ingresó a aquellas casas que tuvieran un altar colocado en sus puertas. Sin embargo, no utilizó un barbijo ni otro tipo de protector facial, algo que es obligatorio en el partido de Tigre desde el jueves para frenar la propagación del coronavirus.