La noche del jueves 12 de setiembre de 2019 tres personas fueron detenidas en el marco de una serie de 20 allanamientos realizados en el barrio Tablada y motivados por los repetidos ataques a balazos y enfrentamientos producidos en la zona sur de Rosario. Según explicó el comisario Claudio Scarafía, de la Dirección de Inteligencia Criminal Estratégica de la Policía de Investigaciones (PDI), a uno de los detenidos en una vivienda de Presidente Quintana al 100 bis se le incautó una pistola calibre 9 milímetros, por lo que fue imputado por el fiscal Matías Edery. Otras dos personas quedaron a disposición de la Justicia Federal en turno, ya que en sus domicilios ubicados en Presidente Quintana al 100 bis se incautaron 300 gramos de marihuana y 100 gramos de cocaína fraccionados para la venta.
Los allanamientos fueron gestionados por el fiscal Edery por una serie de denuncias de vecinos a la central del 911 por hechos violentos perpetrados con uso de armas de fuego en la vía pública registrados en el último mes y medio. Los operativos se llevaron adelante en el barrio Tablada, el Fonavi del Parque del Mercado y el barrio Municipal de Lamadrid y Grandoli, también conocido como “Pimpilandia”, por Roberto “Pimpi” Caminos, asesinado líder de la barra brava de Newell’s Old Boys. Uno de los domicilios allanados fue donde vive Rosa Caminos, recientemente condenada a 8 años de prisión como integrante de una banda narco. La requisa en ese domicilio dio resultado negativo. Diez de los allanamientos se llevaron adelante sobre calle Presidente Quintana entre Grandoli y Chacabuco, varios de ellos sobre propiedades de integrantes de la familia César, reconocida en la zona por su enfrentamiento con otros clanes del lugar, pero todos arrojaron resultado negativo.
Los operativos con resultado positivo se realizaron en Presidente Quintana al 100 bis. En esa cuadra fue detenido Matías Nicolás N., de 32 años, a quien se le incautó una pistola calibre 9 milímetros con la numeración limada y con 18 proyectiles. Sobre la misma cuadra, en dos viviendas no conectadas, fueron detenidos Marcela Q. y Juan Carlos César, alias Purre. En la vivienda de la mujer se incautaron alrededor de 330 gramos de marihuana y en la del hombre 130 gramos de cocaína aproximadamente. La droga estaba fraccionada para la venta. Por tal motivo, fue convocada para trabajar en el territorio la Brigada Operativa Antinarcóticos. Los dos detenidos quedaron a disposición del Juzgado Federal.
Juan Carlos César es además pariente del ex barra de Central, Luciano “Chanchi” César y vivían en la misma cuadra. El 14 de marzo pasado, Chanchi fue asesinado a metros de su casa de Presidente Quintana entre Esmeralda y Chacabuco, donde le pegaron al menos seis disparos en la zona del tórax y el abdomen. Murió rumbo al hospital. Tenía 60 años.Una de las hipótesis del caso se basó en la disputa por la comercialización de drogas. En 2008, un procedimiento por drogas tuvo lugar en su casa y le valió una condena por tenencia para la comercialización de estupefacientes.
Chanchi había sido vinculado al crimen de otro de la pesada canalla, Hugo Bernardo “Sapo” Taborda. Lo que se supo fue que el 8 de julio de 2000, el Sapo llegó con un amigo en auto hasta la casa del Chanchi, le dieron un disparo en el brazo y lo arrodillaron frente a su familia. Chanchi sacó un arma y le disparó a Sapo en la cabeza y el pecho. De la causa judicial salió indemne, para el juez fue legítima defensa. Pero la cosa no terminó ahí. Los hermanos de Sapo lo encontraron en el edificio de los Tribunales provinciales e intentaron matarlo. Fue el antecedente para que en el Palacio de Justicia pusieran detectores de metales.
En 2012, mataron de 24 disparos a un hijo de Chanchi: Casimiro Luciano César en el Fonavi de Lola Mora e Hipócrates. A su vez, Milton César, sobrino de Chanchi, quedó en el ojo de la tormenta cuando lo sindicaron como uno de los asesinos del líder de Los Monos Claudio “Pájaro” Cantero en mayo de 2013. El primero de los nombres que surgió sobre los asesinos del Pájaro fue Milton, pero no era Milton César sino Damario.
Dos días después del crimen del mandamás de Los Monos, la madre de Milton, un hermano y el conductor de la chata en la que circulaban fueron baleados, los tres murieron. La mujer, después de meses de estar internada. Se salvaron el padrastro de Milton y dos de sus hermanitos.