La activación del protocolo para atender a una persona sospechada de haberse contagiado Covid-19 puso en alerta a la comunidad de Salvador Mazza (departamento San Martín), ubicada en la frontera con Bolivia. El protocolo se activó desde el Hospital Juan Domingo Perón, de Tartagal, cuando una mujer de 80 años fue trasladada con un cuadro respiratorio grave. La paciente cuenta con antecedentes de asma, además de ser también diabética y de haber estado internada en Yacuiba (ciudad fronteriza de Bolivia), desde el 14 al 30 de marzo.
Aunque en principio se trataría de un caso sin nexo epidemiológico (ni Salvador Mazza ni Yacuiba son ciudades con circulación de Covid-19), el jefe del programa de la Sala de Situación del Ministerio de Salud, Daniel Romero, explicó que ante cualquier caso respiratorio grave se activa el protocolo.
El gerente del Hospital de Salvador Mazza, Rubén Hualppa, por su parte, indicó que la mujer habría cruzado a la ciudad fronteriza de Bolivia para comprar medicamentos por ser estos más económicos. Una vez en Yacuiba se descompensó y “los médicos la vieron y la internaron”. Fue entonces que “la agarra la cuarentena y cumple con los 14 días de internación” en Bolivia, relató el médico, que se guío por la versión de un hijo de la mujer.
Cuando la mujer quiso volver a Argentina, desde la Aduana se le prohibió el paso. Entonces fue por uno de los pasos fronterizos no habilitados que se extienden por la frontera. Pese a existir la custodia de un gendarme, se la dejó pasar. “Eso es lo que no debió haber sucedido”, afirmó Hualppa al quejarse de la actitud del uniformado.
Cuando llegó a su domicilio, la anciana no estaba en buen estado de salud. El médico de cabecera del PAMI la visitó en su casa y recomendó la internación, pero la familia pidió que quedara en el domicilio. La dejaron con suero y el jueves empezó a empeorar. La llevaron al Hospital y ante el arrastre de sus enfermedades crónicas, y la fiebre alta, además del empeoramiento del cuadro respiratorio, se decidió trasladarla hasta Tartagal, dado que precisaba de un respirador.
Frente al cuadro, el Hospital decidió activar el protocolo por considerarlo un caso sospechoso de coronavirus. Sin embargo, al igual que Hualppa, el gerente del Hospital de Tartagal, Juan López, entendió que podría ser un negativo. Ambos médicos actuaron distinto, dado que Hualppa decidió no aislar al personal de Salud que trató a la mujer, lo que sí se decidió hacer en Tartagal.
Solo tres confirmados
Desde el inicio de la pandemia se asistieron en los establecimientos públicos y privados de la provincia 86 pacientes con síntomas compatibles con coronavirus, 76 resultaron con análisis negativos, es decir que se comprobó que no estaban contagiados con el virus; cinco fueron descartados, dos se encuentran en estudio y tres obtuvieron testeos positivos para Covid-19.
El caso de la anciana enferma trasladada desde Salvador Mazza junto a otro más son dos de cuatro nuevos casos ingresados como sospechosos por presentar síntomas compatibles con coronavirus. Sin embargo, este sábado se pudo descartar a dos de los pacientes mientras que las dos últimas muestras se encuentran en proceso de estudio en el laboratorio de virología del Hospital del Milagro de la ciudad de Salta.
En relación a las tres personas que presentaron resultados positivos, uno se recuperó favorablemente y dos se encuentran con criterio de alta. Pese a que Romero entendía que se había dado el alta a uno de esos dos pacientes, desde el Ministerio de Salud se afirmó que ambos están “próximos a egresar de su internación, ya que presentaron dos análisis respiratorios consecutivos con determinación negativa” de coronavirus.
Desde el Ministerio de Salud Pública a través de la Dirección General de la Coordinación Epidemiológica se recordó que se debe mantener el aislamiento social, preventivo y obligatorio y continuar con las medidas de higiene, lavado de manos frecuente con agua y jabón, toser en el pliegue del codo, higienizar los objetos de uso frecuente y superficies y ventilar ambientes.