La confirmación del envío del proyecto de ley que establece un impuesto extraordinario por única vez para las grandes fortunas determinó que la Cámara baja comience a trabajar contra reloj en sistema seguro para poder realizar una sesión virtual. La decisión política de avanzar con el tributo por parte del bloque oficialista fue puesta de manifiesto por el titular de la comisión de Presupuesto, Carlos Heller y confirmada por las autoridades del bloque.
Desde las oficinas del primer piso del Palacio Legislativo, donde Sergio Massa, Máximo Kirchner, Cecilia Moreau y Cristina Alvarez Rodríguez se reúnen periódicamente, le confiaron a Página/12 que en el ámbito parlamentario ya se trabaja para avanzar con la iniciativa. Aunque advirtieron que la última palabra la tendrá el Poder Ejecutivo.
La conducción del bloque oficialista también confirmó la decisión de abrir el recinto, aunque sea de manera virtual. “Necesitamos las leyes para afrontar la crisis y para afrontar lo que vendrá después, por eso tenemos que hacer que funcione el Congreso”, detallaron fuentes del bloque que conduce Máximo Kirchner.
El proyecto de ley estará “cerradito” en los próximos días y la intención del Frente de Todos es que ingrese por la mesa de entradas de Diputados antes del próximo fin de semana.
Respecto de la necesidad de avanzar con la iniciativa el presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda de Diputados, Carlos Heller, explicó: “Todos sabemos que Argentina no tenía recursos desde antes de empezar la crisis” generada por la llegada del virus Covid -19. En ese sentido, el legislador remarcó en declaraciones a AM 990 que es el Estado quien tiene que “proveer de más hospitales, más camas, más respiradores, más barbijos; tiene que hacer llegar comida a los barrios más carenciados, y la lista es infinita”.
Por otra parte, Heller ratificó que el proyecto para establecer un impuesto extraordinario a las grandes fortunas -impulsado por Máximo Kirchner- se presentará “hacia fines de esta semana” y sostuvo: “Espero que no sea una discusión en términos de oficialismo-oposición”.
Sobre el trámite parlamentario que tendrá el proyecto el diputado coincidió con lo expresado por las autoridades del bloque y adelantó que “llegado el momento” se podría “instrumentar” la modalidad virtual.
Más allá de los tiempos y las formas, en el primer piso del Palacio Legislativo también piensan en los votos. El oficialismo, como se sabe, debe sumar voluntades de otros bloques para lograr la media sanción del proyecto. En ese marco, se espera que los bloques minoritarios acompañen. En ese marco el titular del interbloque Unidos para el Desarrollo, José Luis Ramón, anticipó que acompañará la norma impulsada por el Ejecutivo. Sin embargo, aun no pudo garantizar la posición de los otros siete diputados de su espacio.
Por su parte, el Interbloque Federal que conduce Eduardo “Bali” Bucca decidió, tras las demoras y la falta de definición del oficialismo, esperar al ingreso del proyecto para sentar posición. Uno de los referentes de ese espacio y diputado de Consenso Federal, Alejandro “Topo” Rodríguez, cuestionó, a título personal, el tratamiento que le ha dado el oficialismo a la iniciativa. El diputado por la provincia de Buenos Aires detalló ante Página /12 que “hace más de 10 días hicieron trascender que iban a presentar de inmediato un proyecto; pero no han presentado nada. Tirar títulos sin contenidos es una mala costumbre que no voy a alimentar. Cuando esté el proyecto, nuestro bloque lo analizará y allí podremos tomar una posición”.
Sin embargo, Rodríguez advirtió: “Como criterio general, creo que todo nuevo impuesto tiene que ir acompañado por la rebaja en otro tributo; y debe contribuir a sostener la producción y cuidar el empleo. Un tributo como el que dicen que aplicarían debería ir acompañado por una rebaja de un punto y medio en el IVA (bajar de 21% a 19,5%) y, además, destinarse todo lo recaudado por el nuevo impuesto a garantizar créditos a tasa cero para las Pymes”.
En tanto, desde el ala dura de Juntos por el Cambio, por ahora eligen el silencio. “Hasta que no entre el proyecto y lo podamos analizar no vamos a opinar”, dijeron. Fuentes cercanas a las autoridades del principal interbloque opositor aseguran que muchos de los integrantes del espacio no se sentirían cómodos al avanzar contra los intereses de parte de sus votantes o de sus financistas de campaña. Sin embargo, desde el ala dialoguista encabezada por Sebastián García De Luca señalaron que entienden que es el Ejecutivo el que debe fijar las normas para afrontar la emergencia que vive la Argentina.
Desde hace un tiempo el sub bloque que responde puertas afuera del Congreso a Emilio Monzó está pensando de qué manera poder hacer aportes para mejorar los proyectos del Poder Ejecutivo. La idea es marcar así, desde lo práctico, una diferencia con el resto del bloque. “Sería una suerte de mientras los otros se oponen porque sí, nosotros respondemos con propuestas que mejoran las del Ejecutivo", detalló una fuente cercana a De Luca. Ese sector, denominado dialoguista, entiende que es el Ejecutivo el que diagrama las pautas y leyes que necesita para gobernar y que eso hay que respetarlo”.