La pandemia puso en el centro a los Estados y desnudó las desigualdades de un sistema que, como muchos pensadores aseguran, entró en crisis. 

En este contexto, pensar al Estado del siglo XXI, tal como propone Juan Carlos Monedero a lo largo de 12 clases virtuales que dicta en la Universidad Nacional de Quilmes, cobra especial relevancia: "El Estado es algo realmente complicado, el sujeto más escurridizo de la ciencia política, porque el Estado es la máquina más perfecta de construir obediencias y, por tanto, como la representación más emblemática del poder del Leviatán como dijo Hobbes", de este modo Monedero introduce el recorrido que podrán hacer lxs alumnxs.

"Estamos en una crisis del modelo neoliberal que se está solventando con más recetas de la misma medicina que ha generado profundas exclusiones y una de las respuestas que estamos viendo es el vaciamiento de la democracia", por esto el politólogo español dispara un interrogante para analizar el presente y futuro de las democracias: en qué medida se hace cierta la frase que planteaba Marx cuando decía que si el mercado es el instrumento adecuado para la actualización de los beneficios en las sociedades capitalistas, la democracia liberal se convierte en el elemento político más funcional, ahora cuando el mercado no es capaz de hacer validar los beneficios de las empresas, la democracia deja de ser funcional y, por tanto, abre pasos a planes autoritarios o lo que algunos llaman democracias de baja intensidad.

"El Estado en el siglo XXI no puede tener las mismas características que en el siglo XX, porque la globalización es una realidad insoslayable, no puede haber procesos de autarquía porque sería como deselectrizar a los países. Hay una imposibilidad de regreso hacia esos modelos", advierte.

También, aclara, es necesario sumar nuevos elementos al campo de la ciencia política porque se configuran como espacios de disputa del poder o del propio ejercicio del poder: "Al lado de globalización también vamos a analizar la idea de complejidad, es decir la capacidad de diferenciación de las partes sociales que tiene mucho que ver con el desarrollo tecnológico, donde la democracia está en manos del big data, las redes sociales y de los medios de comunicación que tienen que incorporarse al análisis de la ciencia política como un elemento propio del poder", cierra Monedero.

Recomendaciones:

A aquellos que ya están realizando el curso a distancia, les proponemos que, como suelen hacer, dejen en las contribuciones sus inquietudes, ideas, disparadores de debate para que entre todxs los participantes pueden seguir sacándole provecho a las lecturas y las clases. 

A modo de sugerencia, citen y hagan referencia a qué clase o texto aluden para simplificar el intercambio entre ustedes. 

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