La Unión Obrera Metalúrgica (UOM) negocia con las cámaras del sector una reducción del 30 por ciento en los salarios para evitar despidos por 120 días.
Desde el sindicato le confirmaron a Página/12 la intención de llegar a un acuerdo para preservar los puestos de trabajo, pero advirtieron que todavía hay diferencias. La UOM no quiere que la medida se extienda por más de 120 días, pero los empresarios presionan para que la duración del acuerdo de reducción salarial se extienda por seis meses.
En este punto, el sindicato plantea que la perdida que generará la inflación acumulada más la reducción salarial acordada esmerilaría el poder adquisitivo de los trabajadores de manera sustancial. Según los cálculos que hacen en la UOM, la extensión del acuerdo por seis meses implicaría una perdida en el poder de compra de los trabajadores que alcanzaría el 60 por ciento. En ese marco, advirtieron que si bien la coyuntura impone un esfuerzo para conservar las fuentes de trabajo la intención es que la reducción de salario no supere los cuatro meses.
El otro punto en el que empresarios y sindicalistas todavía no lograron un punto de coincidencia tiene que ver con la modalidad del descuento. La UOM pretende que sea sobre el salario bruto, la patronal quiere que se aplique sobre el neto.
Más allá de los detalles que faltan definir tanto empresarios como dirigentes gremiales trabajan contra reloj. Ambos pretenden que el acuerdo que sellado antes de que comience el periodo de liquidación de sueldos el próximo lunes.
El secretario general de la UOM, Antonio Caló, explicó en declaraciones radiales que no se trata de "acordar salarios a la baja” y que el objetivo es “lograr que no haya despidos por 120 días y que cobren el 70%". "La situación está difícil, como en todos los sindicatos. Cuando se levante la cuarentena, muchas empresas no van a tener trabajo porque está todo parado", argumentó el líder de los metalúrgicos.
El dirigente sindical, a la hora de defender la postura de su gremio, también destacó que las pymes que son un pilar fundamental de la actividad metalúrgica y que sufren el impacto por la parálisis de la económico producto de la medidas tomadas para controlar la expansión de la Covid-19.
Caló, que está en cuarentena por haber tenido contacto con un caso confirmado de coronavirus, aclaró que "los metalúrgico que trabajen en el aislamiento van a cobrar el 100% y los que no el 70%". En ese contexto el dirigente enfatizó que desde el gremio, a través de cada una de sus seccionales, se está trabajando para que en cada uno de los lugares de trabajo se cumplan con los protocolos sanitarios establecidos por el ministerio de Salud.