Habían pasado algunos minutos de las 13 y Detrás de lo que vemos, el programa que todos los mediodías se emite por la AM 750, transitaba por su segmento musical diario. En medio de ese momento de relax, el conductor Claudio Villarruel recibió un mensaje a su teléfono móvil. “Buscá una versión de “Over the rainbow” que canta Melody Gardot acompañada por un chelo. Te va a impresionar”, leyó Villarruel en su WhatsApp. La sorpresa fue que el que le enviaba el mensaje no era otro que el presidente de la Nación, Alberto Fernández, que escuchaba la emisora minutos antes de empezar un almuerzo con Martín Guzmán, el ministro de Economía. Lo que sucedió después fue una de esas cosas que solo la radio permite: el presidente musicalizó un ratito el aire de la AM 750.

Amante de la música, Fernández armó su propia playlist musical -vía WhatsApp- para que acompañara sus quehaceres presidenciales. “Los estoy escuchando mientras trabajo”, escribió. Y mostró su conocimiento musical, al punto que pidió que mejor pasaran otra versión de “Over the rainbow”, que la producción había puesto al aire. “Esa es la grabada en estudio, pero es espectacular la del chelo”, mensajeó, sugiriendo la versión acústica. Mientras su deseo se hacía realidad en Detrás de lo que vemos, el presidente explicó lo “impresionante” de esa versión. “Pensá que es solo un chelo lo que la acompaña”, agregó, convertido -por un ratito- en ”DJ Beto”.

Entusiasmado, Villarruel le pidió al aire que siguiera pidiendo otras canciones. “Sweet melody”, de Melody Gardot”, respondió el Presidente por mensaje. “La voz de Melody Gardot es única”, subrayó. Inmediatamente, la canción sonaba en el aire de la AM 750.

Ese momento radiofónico inédito no iba quedarse ahí. Iba a sumar una nueva canción. “Me llegó la hora de trabajar. La última que propongo. “Oh, Susannah”, cantada por James Taylor”, volvió a sugerir Fernández, a través del servicio de mensajería, al conductor de Detrás de lo que vemos, el ciclo que sale diariamente al aire a las 12 con Villarruel junto a Emanuel Respighi, Sebastián Fernández y Sebastián Cazón.

Tras esa espontánea musicalización, el Presidente se despidió agradeciendo a la emisora y a todos los oyentes que cumplen con el aislamiento preventivo, social y obligatorio. “Me encantó este rato. La música alimenta el alma. Gracias por estar ahí. Los abrazo a la distancia”, escribió Fernández, cerrando esos minutos de relajamiento de su atareada agenda presidencial.