Cuando dejamos las cuestiones de prevención libradas a la suerte. Según el individuo y su entendimiento, hay varias clases de suerte, pero la mayoría siempre destaca 2 tipos: Buena suerte o mala suerte.
Desde el pasado 20 de Marzo, cuando el Presidente de la Nación Argentina, Alberto Fernández, decretara el aislamiento social, preventivo y obligatorio más conocido por la población con el apodo de cuarentena, en la localidad de Oliveros poco se ha hecho al respecto sobre todo a lo cual la responsabilidad del Señor Presidente de comuna, Martin Calori, le corresponde. Pero eso es cuestión de prevención.
Cuando hablo de suerte, mala, puedo destacar los casos positivos de contagio de Covid 19. Una mujer que estaba internada en un efector de salud privado cito en la ciudad de Rosario, contrae durante su internación el virus que ya hace semanas es declarado pandemia mundial. Tras este caso, su hijo, que cuidaba de ella durante su internación, también resulta infectado por el mismo virus.
Mientras tanto la localidad que es un pulmón natural de las grandes ciudades que la rodean, recibía a turistas que se asentaban para realizar el proceso de cuarentena y otros a disfrutar de un paseo de relax.
Hoy, casi un mes después se terminó la flexibilidad de ingreso al pueblo con controles de seguridad de características laxas.
Hoy la suerte pasa a ser suerte mala y la prevención demostró que ya no es cuestión de suerte buena sino de conciencia social, colectiva y compromiso ciudadano.
¡Bendita suerte!
Claudio García
Secretario de Juventud de SuteyH
