La oferta a los bonistas será un menú de diez nuevos títulos públicos, mitad en dólares y mitad en euros, con vencimiento desde 2030 hasta 2047 y cupones con tasas de interés incrementales de 0,5 hasta 4,875 por ciento. El documento detalla la composición de los títulos, cuya combinación de emisiones le permitirá al país una quita de 3700 millones de dólares de capital, equivalente a 5,4 por ciento, y una reducción de 37.900 millones de dólares en intereses, igual a un recorte de 62 por ciento en esos compromisos. En total el recorte nominal será de 41.600 millones. Además de tres años de gracia sin pagar capital ni intereses hasta 2024. Habrá incentivos para quienes acepten la propuesta e ingresen rápido, a partir de poder elegir mejores plazos de vencimiento.
"Hemos tratado de entender las preferencias de los acreedores en función de lo que nos dicen: una mayor reducción de interés más que de capital", reconoció Guzmán este jueves en el anuncio de la propuesta que se hizo en la Quinta de Olivos, encabezado por el presidente Alberto Fernández, la vicemandataria Cristina Fernández, los gobernadores y jefe de gobierno porteño La propuesta fue enviada a Comisión de Valores estadounidense y se espera que aprobación para este lunes. "La República ha presentado una declaración de registro ante la Securities and Exchange Commission para que registre los Nuevos Bonos pero aún no ha entrado en vigencia", aclaró Economía.
Las líneas directrices de la propuesta es la postergación de pago de intereses y capital por tres años, una quita de capital de 5,4 por ciento y de 62 por ciento de reducción de intereses. Para ello se ofrecen diez nuevas series de bonos, cinco en dólares y cinco en euros para los plazos similares.
El juego de la silla
El Ministerio de Economía inscribió un grupo para cada emisión. Los primeros tres reúnen a los bonos lanzados durante el macrismo, sobre los que habrá quita de capital y reducción de intereses, y dos con los bonos PAR y Discount. Estos últimos dos no tienen quita, dado que sus tenedores ya habían sufrido un recorte en la emisión original por ser estos nacidos con el canje de 2005 y 2010. Todos comienzan pagando una tasa de 0,5 por ciento después de los tres años de gracia.
El Grupo 1 incluye a los bonos más cortos, con vencimiento entre 2021 y 2023. Se le otorga un bono con vencimiento en 2030 y un recorte nominal de capital del 12 por ciento. Pagará un cupón semestral con tasa de interés escalonada de 0,5 hasta 1,75 por ciento. El Grupo 2 son los bonos que expiran entre 2026 y 2036 y se canjean por un bono a 2036, con una quita de 5 por ciento y tasa escalonada hasta 3,875 por ciento. El Grupo 3 es para el bono que vence en 2046 e incluye el bono "a cien años", el cual se reemplaza por un título con vencimiento en 2047 y tasa hasta 4,75 por ciento. El Grupo 4 es el bono Discount, que se reemplaza por un título a 2039 y tasa desde 0,6 hasta 4,75 por ciento. Y el Grupo 5 es el bono PAR, con mismas condiciones y vencimiento en 2043. Ninguno tiene quita.
Una estructura similar tiene en euros para plazos similares, pero los recortes nominales de capital son de 18 por ciento parar al Grupo 1, y de 5 por ciento para los Grupos 2 y 3. Según explicaron fuentes oficiales, este mecanismo tiene la posibilidad de que el tenedor que acepte la propuesta puede elegir quedar en el canje propuesto o elegir bonos de otro grupo.
Si se consigue el piso de aceptación y se universaliza la propuesta, los que no hayan aceptado serán castigados otorgándoles los vencimientos que quedan desde los más largos. Se supone que el inversor quiere el vencimiento más corto. En estos 20 dias se iniciarán las rondas de consultas, conocidas como el road show (virtual), y se esperan turbulencias.
"Va a haber gente jugando muy fuerte en estos días. Hay mucho en juego. Y los que quieren que la Argentina pague más a costa de más ajuste van a ser sonar fuerte su voz", anticipó Guzmán este jueves en el anuncio de la propuesta a los bonistas. Es que ya fondos habían comenzado a tener una postura sumamente hostil en las propias negociaciones.
En varios medios se dieron a conocer aprietes directos de representantes de los principales fondos de inversión con tenencia en títulos argentinos que amenazan con esperar "hasta que cambie el Gobierno hacia uno con un perfil más amigable con el mercado", según reconocieron fuentes vinculadas con la negociación a Página/12. "Por eso va a ser muy importante como sociedad el compromiso de todos juntos para estar unidos sobre esta oferta, porque es fundacional para la recuperación y un desarrollo sano de la Argentina", cerró Guzmán su presentación del jueves.