Aníbal Quiroga arribó con un grupo de 180 repatriados procedente de Bolivia, había informado al Consulado argentino y a las autoridades de Migraciones en qué lugar realizaría su cuarentena. Sin embargo, desde que llegó a su ciudad, General Mosconi, fue maltratado por trabajadores de seguridad, salud y el municipio, que no supieron cómo actuar.

Quiroga terminó alojado en un gimnasio destinado a atender a quienes sufran de coronavirus en caso de desborde del sistema de salud, pero que no reúne las mínimas condiciones edilicias ni de atención.

Salta/12 intentó comunicarse en vano con el intendente Isidro Ruarte, quien hace unos días recibió $5 millones de los fondos de la ayuda del tesoro nacional (ATN), pero en las redes sociales, reconoció que "ese complejo no está en condiciones, tampoco yo no puedo estar en todas”.


El periplo de Qiro

Qiro, su nombre artístico, es cantor, la cuarentena lo encontró “grabando unos videoclip” en Cochabamba, Bolivia. Desde ese momento comenzó a tramitar su regreso a General Mosconi, la ciudad en la que nació y donde crece su hijo de tres años.

El viernes 17, “luego de completar todos los requisitos que nos solicitaba el Consulado argentino”, esto era, guardar una primera cuarentena en Cochabamba, disponer de un lugar seguro donde realizar el aislamiento obligatorio de 14 días en Argentina y someterse a los estudios de rutina antes de partir, se dispuso a volver junto a otros 180 repatriados.

“Todos veníamos de Bolivia, pasamos todos los controles y en la frontera nos volvieron a tomar la temperatura y a pedir los papeles que indicaran en qué lugar íbamos a realizar el aislamiento seguro”, le dijo Quiroga a Salta/12.

El sábado por la mañana, pasaron por Yacuiba a territorio argentino, “dejaron a una señora en Salvador Mazza y creo que a otra en Tartagal y luego me dejaron a mí”. Allí comenzó su periplo, fruto de la falta de coordinación de todo el Comité Operativo de Emergencia de Mosconi.

“Me dejaron a un kilómetro de la entrada a Mosconi y no había nadie, cuando supuestamente ya me tenía que estar esperando el operativo de salud”, explicó el artista, quien añadió que fueron los mismos policías que en un patrullero escoltaban al transporte los que avisaron a la Policía local para que vinieran a buscarlo.

Cuando arribó la Policía local, le exigieron que algún familiar lo debía buscar y trasladar a la vivienda que había alquilado para pasar el aislamiento obligatorio, “yo me negué porque no quería involucrar a más gente y no era lo que me habían indicado desde el Consulado, eran ellos los que me tenían que trasladar”.

La inoperancia estatal no quedó allí, luego llegó la ambulancia con un equipo de profesionales a quienes “se las notaba muy nerviosas, me tomaron la temperatura y me hicieron preguntas y corroboraron que yo estaba asintomático, sin embargo, ninguno me quería trasladar y se tiraban la pelota entre ellos”, dijo Quiroga.

Luego de que un periodista filmara y subiera lo sucedido a su cuenta de facebook, una camioneta de la Policía lo trasladó hasta el domicilio informado. Allí, cuenta el músico sorprendido, “me dejaron en la puerta y se fueron sin siquiera corroborar si había ingresado”.

De todas maneras, se dispuso a descansar "después de un viaje de más de 24 horas", pero un par de horas más tarde volvieron a buscarlo para trasladarlo al centro destinado para personas con coronavirus en caso de un desborde del sistema de salud.

“Yo creo que se vieron presionados porque el video que subió el periodista comenzó a circular y la gente no sabía quién era yo, o si estaba contagiado o no, son tiempos en donde te matan si dudan que podés tener coronavirus”, aseguró Quiroga.

Fue el mismo director del hospital local, Marcelo Benavídez, quien junto a un patrullero y una ambulancia lo trasladó al complejo deportivo General Mosconi sin darle tiempo ni siquiera a recoger sus cosas.

“Lo peor es que me pidieron que salga y yo dejé todo, pensé que me llevaban al hospital a hacer algún estudio de rutina y terminé pasando la noche en ese lugar sin ni siquiera abrigo ni comida”, expresó.

Un Centro de ¿recuperación?

Ya en el complejo, Benavídez lo visitó nuevamente sólo para decirle que le llevarían comida y algo para tomar, “pero ni la fiebre me tomó. Sólo me dijo que al otro día verían qué hacían conmigo”. “Se fue y me dejaron sólo en ese lugar vacío y frío”.

El artista indicó que el lugar dispuesto supuestamente para atender casos confirmados de Covid-19 no tiene las mínimas condiciones de salubridad, “el lugar está deplorable, todo roto, con caca de paloma y de perros, ahí no puede pasar una noche quien esté vulnerable con una enfermedad”.

En los videos y fotografías que compartió Quiroga, queda expuesto el estado de las instalaciones, con ventanas rotas, sanitarios en mal estado, sin agua caliente, “sólo pusieron algunas camas en medio de la cancha, es lo que evidentemente se hizo en el lugar para la foto”.

Finalmente, el domingo por la mañana Quiroga fue trasladado al domicilio donde cumplirá la cuarentena. “Venían todos a pedirme disculpas por lo que había pasado y se culpaban unos a otros”, expresó. Entre ellos, el director del hospital “pero le dije que no es eso, sino que están jugando con la vida de la gente, no pueden poner ahí a quienes estén enfermos, no son las condiciones para alguien que está sufriendo”.