El director médico del Hospital General de Agudos Juan Fernández, Ignacio Previgliano, afirmó este martes que “no hay ninguna posibilidad” de que el anestesista residente que dio positivo en el test de coronavirus se haya contagiado en esa institución.
“Lo que se pudo determinar es que no tuvo contacto con ningún paciente con covid-19 del hospital. Sabemos que trabajó en el área de cirugía con el equipo perfecto para no contagiar ni contagiarse, con su camisolín repelente de fluidos y máscara”, señaló Previgliano en declaraciones a la prensa.
En este sentido, aseguró que “no hay ninguna posibilidad” de que se haya infectado el residente de anestesiología del segundo año que el pasado 15 de abril comenzó a manifestar dolor de cabeza, temperatura de 37,4 grados y dificultad para tragar. Tras detectar los síntomas, se dispuso el aislamiento de 18 trabajadores del área de terapia intensiva del hospital, que habían estado en contacto con el anestesista tanto en la guardia como en un curso de RCP.
“Se buscaron los contactos estrechos, que son personas que estuvieron con el anestesista sin protección por más de 15 minutos, cuando terminó la cirugía y hubo una reunión en la que como nadie pensó esto, no estaban con barbijos”, agregó el director médico del hospital del barrio porteño de Palermo. A su vez, explicó que por la pandemia de coronavirus se realizó una restructuración en el hospital, por lo que los residentes de anestesiología empezaron a trabajar en la zona de terapia intensiva.
“Son ocho residentes y 10 médicos de terapia los que estuvieron en contacto con el residente de anestesia, por lo que se encuentran aislados por prevención”, precisó Previgliano y deslizó la posibilidad de que el anestesista pudo haber contraído covid-19 a través de su pareja “que trabaja en otra institución médica”.
En cuanto a la jefa de anestesistas del Fernández, indicó: “Estaba con síntomas menores y como vive con personas mayores hizo una consulta, y por precaución se la internó en una clínica privada, donde se le hizo el hisopado y hoy vamos a tener los resultados”.
Respecto del funcionamiento del hospital, Previgliano sostuvo que si bien hoy y mañana va presentar un déficit de anestesistas de planta, no habrá menor capacidad de atención porque se dispone de otro equipo de anestesistas, así como también de médicos de guardia.
Como medida preventiva, el centro asistencial decidió aumentar la cantidad de camas de terapia intensiva, de manera que pasó de tener 16 camas con ventilación mecánica a 34, con la posibilidad de habilitar hasta 60 camas. “Hoy solo está ocupado el 10% de las camas de terapia intensiva. Tenemos siete pacientes con Covid-19, de los cuales cinco son pacientes leves, uno es moderado, y uno está en terapia sin asistencia mecánica”, detalló Previgliano.
Por último, el profesional remarcó: “Acá se saltó una cadena de control, los médicos van a hacer su ateneo sin la protección correspondiente, no podemos echar la culpa al hospital por un conducta que fue relajada, un hábito que quizás aún no tenemos incorporado”.