El gobierno nacional le hizo un guiño ayer a la industria santafesina en cuanto a reapertura gradual de la cuarentena general. Lo hizo a través del ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, en una teleconferencia mantenida con dirigentes de la Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe), y de la que participaron el gobernador Omar Perotti y el ministro local de Producción, Daniel Costamagna.

"Lo que sucedió con la maquinaria agrícola en su provincia era algo en lo que teníamos puesta mucha expectativa. Por eso pregunté hace unos minutos en charla con el ministro de Salud, qué había sucedido con la reapertura de algunos sectores en cuanto a contagios y sinceramente, saber que hubo nulos o muy pocos casos aislados, es una buena noticia", se entusiasmó Kulfas. "Esta semana, además volvió el comercio electrónico y algunos nichos de actividad se han habilitado. Vamos a avanzar también con fábricas exportadoras y protocolos que vayan gradualmente, permitiendo que la actividad se recupere", adelantó.

La señal cayó de parabienes en los industriales y fue interpretada como el anticipo de una mayor reapertura de la actividad económica. El presidente de Fisfe, Víctor Sarmiento, dijo: "La provincia tiene afectadas a 3.500 empresas y 65 mil puestos de trabajo, sobre todo en la industria manufacturera. Valoramos, claro, la decisión tomada por las autoridades en materia sanitaria. A nivel provincial y nacional, estamos intensificando las gestiones. Y valoramos también ahora que el ministro Kulfas, también el gobernador y su ministro Costamagna, nos estén escuchando. Debemos manifestar la dificultad de aquellos que incluso estando en actividad no tienen adónde ubicar sus productos, por la lógica falta de consumo".[

Perotti intervino en la conferencia para remarcar su advertencia de cortarle la energía eléctrica a las empresas que no cumplan con el protocolo sanitario. "Cuando se determinó la primera cuarentena, lácteas, frigoríficos, molinos harineros y otras actividades, siguieron trabajando. Y tuvieron una actitud muy responsable. Sobre todo cuidando que no haya ninguna instancia de contagio. Y entonces aquí trabajamos en una Declaración Jurada doble, que presenta el empleador y también el trabajador, manifestando que no ingresó a trabajar con fiebre, que no está entrando con sintomatología a la empresa. Entonces, ante una actitud seria del Estado santafesino, las empresas, las entidades productivas, los sindicatos, los trabajadores, no queríamos que nadie entre a jugar por el costado. O se hacían las cosas bien, o le bajábamos la palanca. Lo primero, como dijo el presidente, es el cuidado de la vida, de cada argentino, de cada santafesino y cada santafesina. Eso no nos hace descuidar la producción, sino al contrario, pensar con imaginación cómo hacemos para mover la economía moviendo la menor cantidad de gente, en este contexto, o moviéndola de un modo en el que se pueda resguardar a cada uno de los que sale a la calle y va a trabajar", concluyó.