Una fábrica de ladrillos de hormigón despidió a diez obreros a pesar de la vigencia del decreto presidencial que lo prohíbe. Así lo denunció el Sindicato Ceramista de Capitán Bermúdez al revelar lo ocurrido en Brimax SA, una bloquera ladrillera situada en Fray Luis Beltrán, propiedad de las constructoras Brayco y Pecam. Esta última es una habitual beneficiaria de las licitaciones de obra pública de provincia de Santa Fe en los últimos años. Eso no impidió que resolviera deshacerse de 10 trabajadores a pesar de que la ley actual en la emergencia sanitaria lo prohíbe. "La empresa le prohibió el ingreso a diez compañeros en este momento tan difícil", denunció el titular del sindicato, Juan Moreyra.