Los empleados municipales de la localidad de Urundel, del departamento de Orán, en Salta, reclaman un incremento del 30% en los salarios. La actual gestión municipal no adhirió al aumento de la provincia, firmado el 7 de marzo, y en la localidad no hay paritaria. En ese marco, elevaron el reclamo con ollas populares desde el martes en las puertas del edificio municipal.
El intendente Germán Caraita afirmó que están negociando un incremento escalonado de 30% sobre el básico hasta agosto.
El secretario general de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) de Urundel, Gabriel Domínguez, contó a Salta/12 que la gestión del intendente “no adhirió al acuerdo firmado por la provincia y con los sueldos de febrero y marzo no se pagó aumento”.
Domínguez explicó que la adhesión provincial era necesaria porque “no hay paritarias municipales en Urundel y todos los años el intendente adhiere a las provinciales para tener los aumentos”. “Es lo que ha sido siempre”, destacó.
El 7 de marzo, el gobierno de Gustavo Sáenz, tras intensas negociaciones con los gremios docentes, firmó un acuerdo de un aumento del 30% sobre los básicos escalonado hasta julio. Se acordó un 8% en febrero, un 8% en marzo, un 4% en mayo y un 10% en julio.
Por su parte, Caraita afirmó a Salta/12 que están en negociaciones con los gremios de ATE y la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN). El funcionario contó que la propuesta del municipio consistiría en un incremento del 30% sobre el básico y de forma escalonada hasta agosto. Dicho aumento se contabilizará desde abril y no habrá retroactivo a los meses de febrero y marzo. De ser así, según los empleados, solo se otorgaría un aumento de $2500 hasta agosto.
En tanto, el secretario general de ATE, relató que ayer tuvieron una audiencia junto al intendente, aseveró que “hay una posible negociación, pero todavía no llegamos a un acuerdo". Los trabajadores alegan que la propuesta del intendente es insuficiente y piden que el 30% se otorgue sobre lo remunerativo y no sobre el básico. Además, solicitan un bono extra para los meses siguientes.
Mientras, Caraita dijo que están “tratando de hacer todo lo posible y hemos quedado en seguir negociando”. Sin embargo, apuntó contra ATE al afirmar que “ellos no quieren ceder” y contó que con la UPCN el acuerdo fue firmado ayer. Destacó que desde su gestión se pagó en marzo, y por única vez, un bono de $2000 para todos los trabajadores municipales.
Actualmente la planta reúne a 115 trabajadores que cobran entre $13.000 y $18.000, teniendo como variante los años de antigüedad.
Domínguez contó que como medidas de fuerza están realizando ollas populares desde el martes en las puertas del edificio municipal y no están prestando servicios. “A modo de reclamo, nosotros llegamos y marcamos nuestras tarjetas, y nos quedamos en las oficinas nada más”, describió.
