El Gobierno Nacional empezó este viernes la campaña de realización masiva de análsis con el objetivo de determinar la circulación de coronavirus en personas que hayan cursado la infección sin sufrir síntomas. Los tests son voluntarios y anónimos y servirán para estudios epidemiológicos, no para diagnosticar la enfermedad. Los primeros se realizaron en la estación de trenes de Constitución. La próxima semana se ampliarán a las terminales de Retiro y Once.
Los análisis se están realizando en el espacio de la estación Constitución donde habitualmente se compran los pasajes de larga distancia. Allí instalaron siete puestos, tres de ellos para la extracción de muestras y los restantes para la espera de los resultados.
A quienes acceden a realizarse el test se les toma una muestra de una sola gota de sangre. En resultado se conoce tras un lapso de 15 y 20 minutos. En ese tiempo el personal asignado al operativo brinda información sobre cómo evitar la transmisión del coronavirus.
La campaña de testeos comenzó las 9 de la mañana. Para el primer día se estableció realizar 400 análisis. El plan del MInisterio de Salud es llegar a un total de 1200 análisis.
En forma paralela la Ciudad de Buenos Aires también dispuso la realización de rápidos. En su caso, empezará a hacer pruebas en geríatricos, a personal de salud y miembros de las fuerzas de seguridad.
Cómo son las pruebas y a quiénes se le realizan
El estudio detecta anticuerpos. La presencia de los mismos indica que el organismo de la persona en cuestión reaccionó a la presencia del SARS-CoV-2.
Para determinar efectivamente si alguien está cursando la enfermedad se debe realizar un hisopado para tomar una muestra que luego es sometida a un análisis más complejo que permite determinar si hay o no presencia de coronavirus. Esas pruebas son realizadas en el Intituto Malbrán o en los demás laboratorios especializados que fueron capacitados a tal fin.
Para realizarse los tests rápidos que puso en marcha el Ministerio de Salud hay que ser mayor de 18 años. Además, la persona debe tener al menos 21 días sin presencia de síntomas como fiebre, dificultad para respirar o la pérdida súbita del sentido del olfato y del gusto.
Lo primero que hace el equipo médico con aquellos que acceden a someterse a la prueba es hacerlos pasar por un escáner térmico para medir su temperatura. En caso de no presentar fiebre, se realiza un pinchazo en el dedo del paciente para extraer una gota de sangre mediante un capilar, un tubito muy fino.
Acto seguido, el capilar se coloca en un dispositivo que hace fluir la sangre sobre un soporte que contiene un reactivo. Esto produce una reacción bioquímica que se expresa en diferentes líneas de colores, que cuales dan cuenta del resultado.
La aparición de sólo una de las líneas de control indica que el resultado es negativo y que la persona no generó anticuerpos contra el coronavirus. Si aparecen dos líneas implica que apareció un primer anticuerpo, lo que significa que el diagnóstico es positivo. Por último, también puede llegar a mostrarse una tercera línea, la cual advierte la presencia de un segundo anticuerpo.