La cacica de la Comunidad El Trementinal – Churqui Ava Guaraní Tape Iguapequi, Natali Vásquez, denunció públicamente que las familias productoras rurales que habitan en 13 parajes en la costa del Río Grande de Tarija, en el límite con el Estado Plurinacional de Bolivia, sufren la presión de grandes productores de caña de azúcar de aquel país que les disputan tierras del lado argentino.
“Esta es la realidad que vivimos como pueblos originarios, es cada vez más desesperante porque la gente con mucho poder económico aprovechan de usurpar tierras argentinas", sostuvo Vásquez en un texto que escribió para Salta/12 y en el que detalló que aunque el problema viene de vieja data, ahora las diferencias son con el ciudadano boliviano Horacio Cruz, quien en el último cruce que tuvieron estuvo acompañado por miembros de la Policía Marítima Pluvial y Lacustre de Bolivia, que cruzaron al lado argentino en una lancha de la fuerza. La cacica dijo que uno de ellos, que se identificó como el capitán Suárez, la amenazó, y que sintió temor por ella y por su hijo adolescente que la acompañaba en ese momento.
Vásquez relató que los entredichos con Cruz comezaron el 3 de abril pasado, cuando el hombre "ingresó (...) con 4 personas para trabajar en tierra argentina". Dijo que los comuneros le manifestaron que estaba violando la cuarentena y "reaccionó de malas maneras e incluso en forma amenazante" y "se quedó cuatro días más” antes de retornar al país vecino.
“Volvió el 18 de abril (…) con varias personas para seguir trabajando en cultivo de caña y cerrar más tierras. En ese día yo estaba pasando por ese camino que es desde siempre y me corrió con machete, según él, es propiedad privada y es territorio boliviano. Me prohibió la libre circulación y el acceso a los márgenes del Río Tarija", narró la cacica.
Añadió que el 23 de abril Cruz vino acompañado por “el capitán Suárez de la Armada Boliviana y efectivos uniformados y armados, y cruzan el Río Grande Tarija a territorio argentino. Yo estaba pasando por ese camino que fue de mis ancestros para ir al río y los militares estaban muy agresivos, me dijeron que no puedo transitar por ese lugar y me quisieron llevar detenida si insistía en pasar. Como yo me seguía quedando, me empezaron a amenazar con que me iban a agarrar en Bolivia y también van a decomisar nuestra lancha, que es nuestro medio de transporte para cruzar el río. Amenazaron con volver el 2 de mayo” y “poner patrullas bolivianas en la orilla del río diciendo que es un río boliviano. Estas cosas vienen pasando desde hace muchos años. Todavía buscan alambrar más tierras para sembrar caña destinada al contrabando hacia Bolivia", aseguró Vásquez.
Vásquez agregó que uno de los hombres armados “dijo que tiene toda la autoridad para llevarme presa. Diga que yo estaba en el caballo, por eso capaz que no se animó a acercarse, a agarrarme, encima estaba con mi hijo que tiene 15 años. Y mi hijo estaba caminando por eso también me da un poco de miedo porque ellos estaban bien armados y yo pensaba que no eran policías, pensé que el hombre (Cruz) como es un tipo de mucho poder económico capaz que debe tener plata para pagar para que se vistan de policías pero en realidad no son" y "que me peguen un tiro, ¿no? Y nadie se iba a enterar".
La cacica contó que no pudo hacer la denuncia penal por estos hechos, porque los habitantes de estos parajes están aislados en la cuarentena, dado que tienen que salir por Bolivia. Dijo que por eso decidió hacerla de manera pública. Ayer por la mañana recibió una llamada de Gendarmería Nacional.
Parajes aislados
La comunidad Tape Iguapequi está integrada por familias habitantes de 13 parajes rurales extendidos a lo largo de 100 kilómetros al costado del Río Grande de Tarija, del lado argentino. Están en jurisdicción del municipio de General Mosconi, en el departamento San Martín.
El Trementinal y Churqui se ubican en el medio de la lonja que forman los parajes a la vera del río. Son unas 30 familias agricultoras que salen al pueblo de Aguas Blancas, en el límite con Bolivia, a unos 30 kilómetros, sin embargo, como no hay caminos del lado argentino, cruzan el río hasta el territorio boliviano y transitan por la carretera nacional 33 hasta la ciudad de Bermejo, de donde retornan a suelo argentino para arribar a Aguas Blancas.
En línea directa, Mosconi, el municipio cabecera, dista 75 kilómetros, pero no hay caminos directos y para llegar a él deben dar un rodeo que eleva a 250 kilómetros la distancia.
En ese territorio las familias ava guaraní se dedican a cultivar sus huertas o cercos y crían animales a campo abierto. Vásquez aseguró que “toda esta zona sufre los atropellos de empresarios bolivianos" que incluso desde hace muchos años "matan los ganados con armas blancas".
"Son 140 familias más o menos que están pasando estas situaciones porque están en las orillas y la gente que viene del otro lado" empieza ocupando un "pedacito de tierra y luego se termina agarrando más grande, metiéndose más, haciendo desmontes y por causa de eso es que el desborda el río y pasan un montón de cosas, porque ellos no respetan en realidad lo que vive acá la gente, empiezan a agarrar más tierras, a cerrar, y como tienen plata, entonces mueven todo”, sostuvo.
La cacica recordó que hace unos 30 años hubo un avance de productores de Bolivia en el paraje Algarrobito, y los comuneros quedaron con solo 250 hectáreas para 30 familias. "Hoy en día hay caña toda esa parte", enfatizó.
Límites difusos
Según la comunera, no saben con certeza donde está el límite internacional, "mis abuelos dicen que antes era el Río Grande Tarija. Después de muchos años han puesto mojones" de ambos lados del río, recordó. Sin embargo, dijo que en la década del 90 estos mojones fueron arrancados por empresarios cañeros.
Por eso pidió a las autoridades argentinas “que vengan para ver cómo es este tema de los límites, que se aclare de una vez. Así nosotros dejamos de tener conflictos con esta gente, porque ya estamos peligrando hasta la vida, porque a mí muchas veces me llamaron en privado, me dijeron 'si vos te seguís metiendo por la comunidad te vamos a hacer desaparecer porque vos sos la única que jodés, y hablás, y pedís, y vas por los medios siempre'”.
"Exigimos la presencia de las autoridades del departamento San Martín porque acá no se las conoce", agregó. Según recordó, recibieron visitas de autoridades solo en dos oportunidades: en noviembre de 2009 el entonces gobernador Juan Manuel Urtubey y el intendente de Mosconi, Isidro Ruarte, "hace como 15 años".
El reclamo de los comuneros es acompañado por el Frente Popular Darío Santillán, que sostiene merenderos en esa zona. La organización denunció que "los usurpadores" buscan avanzar sobre el territorio ancestral y están perjudicando a los habitantes indígenas porque "a causa de los desmontes, se desbordan los ríos afectando las viviendas y los cultivos de la comunidad. Exigimos la libre circulación en el río, de eso depende la subsistencia de la comunidad", insistió antes de reclamar a las autoridades argentinas que "tomen cartas en el asunto".