No es extraño escuchar que en la Comarca Andina del Paralelo 42° las embarazadas que viven en Chubut declaran domicilio en Río Negro para ser atendidas en el hospital de alta complejidad más cercano que es el de la ciudad de El Bolsón. Es habitual que muchos docentes vivan al norte del paralelo pero den clases al sur y que los chicos asistan a la escuela en una provincia distinta a la que están domiciliados. El límite sur cordillerano entre las provincias de Río Negro y Chubut se puede atravesar por dos rutas: de norte a sur la Provincial 16, y un poco más orientada al Este la reconocida Ruta Nacional 40. Pero algo es seguro y es que esta frontera no existía en la vida cotidiana de los pobladores de la Comarca hasta que llegó el primer caso de Covid-19.

A principios de abril, esta comunidad turística con más de 40 mil habitantes se encontró de un día para el otro con un cierre abrupto impulsado por el ministerio de Seguridad de la provincia de Chubut, cartera encabezada por Federico Massoni, ante la llegada del Covid-19 a la región. El miedo a dejar de ser parte del privilegiado grupo de provincias sin casos sumado a la imposibilidad estructural de Chubut para contener cualquier emergencia sanitaria ante la falta de recursos e inversiones pudieron más que la lógica y que las palabras de todos los representantes políticos de la zona.

“El Paralelo separa la ciudad rionegrina de El Bolsón de las localidades chubutenses de Lago Puelo, El Hoyo, Epuyén y El Maitén cuando esta ciudad es el epicentro de la Economía. La Comarca es una sola. Hay mucha gente con domicilios cruzados respecto de sus lugares de trabajo y existe una gran informalidad económica. El cierre del Paralelo fue una medida extrema”, asegura el concejal por el Frente de Todos en Lago Puelo, Ángel Gangemi.

La división tuvo lugar hace más de un mes cuando el Intendente de la localidad de El Bolsón, Bruno Pogliano, dio positivo por Covid-19 tras regresar de un viaje por Italia en pleno mes de marzo. Pese a este caso positivo, no existió un brote de la enfermedad en la zona aunque las medidas de seguridad interprovinciales se endurecieron con el pasar de los días. No es un secreto el deplorable estado en que se encuentra la provincia de Chubut por lo que cualquier ingreso del virus dejaría en evidencia que se trata de uno de los eslabones más débiles de la región Patagónica. La respuesta represiva resultó ser la mejor solución que encontró el ministro Massoni para la gran cantidad de conflictos que la provincia atraviesa hace ya varios años.

El funcionamiento no reconocido de la Comarca Andina siempre fue motivo de debates en cuanto a recursos pero todas las localidades de la región reconocen en su Carta Orgánica que forman parte de ella. Hoy en día las provincias hacen frente a la Emergencia Sanitaria con una reacción proteccionista, de cierre de fronteras que dejan lado a lado del Paralelo las realidades de una comunidad acostumbrada a un traspaso cotidiano.

La empresa de viajes La Golondrina, único medio de transporte interurbano en más de 70 kilómetros a la redonda, dejó de funcionar desde que comenzó el confinamiento. Sin este medio quienes viven en parajes aislados sin vehículos particulares no encontraron formas llegar y acceder a insumos de primera necesidad. Muchos vecinos y vecinas debieron organizarse para asistir a adultos mayores que quedaron fuera del mapa.

Las familias con custodia compartida no pueden trasladar a sus hijos (pese a que en ocasiones se encuentran a 500 metros de distancia) y de esta forma la crianza recae obligadamente en uno de los progenitores que en la gran mayoría de los casos son mujeres, las más golpeadas por la crisis económica. “Poder llevar o traer a tu hijo con su otro progenitor hoy depende de la buena voluntad del oficial de la Policía de Chubut que esté de turno”, asegura una vecina a este diario.

Las personas que se enferman o necesitan medicamentos del lado Chubut del paralelo sólo tienen hospitales rurales y en ocasiones terminan teniendo que viajar 160 kilómetros hasta la localidad de Esquel en lugar de hacerlo 20 en dirección a El Bolsón.

El pasado 19 de marzo una vecina de Lago Puelo (Chubut) tramitó una autorización para trasladarse desde su residencia a El Bolsón, provincia de Rio Negro. Su objetivo era adquirir medicamentos para su madre, una persona mayor y paciente oncológica, que sólo pueden adquirirse en las farmacias de dicha localidad. La respuesta llegó el 4 de abril en un mail en el cual el ministerio de Seguridad de Chubut informaba que la solicitud no reunía las condiciones para otorgarle la autorización para circular por la provincia. La madre de esta pobladora había muerto el 30 de marzo sin recibir sus medicamentos.

Martín Tula es productor y miembro de la Feria Franca de El Bolsón. Que es una distinta a la famosa Feria Artesanal. “En la Comarca, las experiencias de la economía social y solidaria, como podrían ser la Feria Franca, la Saldita o la Feria Regional, tienen un elemento central en su identidad que es la vinculación al territorio”, asegura Tula. “Un territorio comarcal que se construye en un fluir entre límites. Para entender como afecta en este caso el cierre de las fronteras provinciales o municipales solo bastaría con imaginar el escenario montañoso de la Comarca, y reconocer desde lo alto un sábado cualquiera a la mañana la circulación de todos los productores, elaboradores, artesanos, recolectores, emprendedores y consumidores locales”. El tránsito de un lado a otro es constante aunque los recursos están directamente asociados a la realidad de cada provincia. “Sin embargo, en la otra vereda, la economía popular No encuentra esos límites, compramos, vendemos, intercambiamos, trocamos, compartimos, sin importar. En épocas de cosecha, todos estamos yendo y viniendo con manzanas, nueces, ciruelas, jugos y dulces”, explica Martín. Este año la realidad es otra.

Tras varios intentos por hacer llegar este reclamo sin ser escuchados y a más de un mes del cierre del paralelo, los intendentes de la Comarca tienen una propuesta conjunta para los gobernadores Arabela Carreras de Río Negro y Mariano Arcioni de Chubut. Que el cierre sea a la entrada de Bariloche que es por donde llegan insumos en general para toda la Comarca. Una vez controlado el brote en El Bolsón el verdadero riesgo para la entrada de casos es la ciudad de San Carlos de Bariloche, Río Negro.

“Es necesaria una buena barrera sanitaria y se puede replicar el mismo cierre hacia el Sur en Leleque para evitar el ingreso por Esquel porque son los lugares por donde más probablemente ingrese el virus. Hay una fuerte demanda de la gente para levantar el paso porque no se entiende de las provincias que existe una codependencia económica y social. Hay padres que tienen a sus hijos en Bolsón mientras está en Chubut y viceversa. Hay lazos integradores propios de una única localidad”, explica a Página/12 Gangemi.

Son los intendentes quienes hoy por hoy “atajan las cuestiones locales particulares de la Comarca. Mucha gente no puede más con este corte sin precedentes. Necesitan ver a sus hijos, los echan de sus trabajos. No pedimos que se libere del todo pero sí que existan permisos correspondientes con la situación particular de la Comarca Andina”, finaliza el concejal.

La respuesta de Massoni hasta el día de la fecha es aumentar los controles y traer más policía a la zona. Parece ser la única alternativa que encuentra la provincia de Chubut para aplazar un impostergable estallido social.