En el mundo previo a la pandemia, las pequeñas y medianas editoriales vivían en estado de feria permanente para compensar el impacto de la recesión económica de los últimos cuatro años. Y ahora ese estado se quiere mantener online. La Feria del Libro en Casa –del 4 de mayo al lunes 18 en redes sociales como Instagram, Facebook y Twitter- es una iniciativa de Milena Caserola (Milena Pergamino y Milena París), Eloísa Cartonera, La mariposa y la iguana, Hekht, Libretto, Piloto de Tormenta, Paisanita, Ediciones Anarres, Alcohol y Fotocopias, Librería y Editorial La Libre y Librería Territorismo para no extrañar la suspendida Feria Internacional del Libro de Buenos Aires. FINDE
es una feria de editoriales independientes de la provincia de Buenos Aires , en la que participarán más de 50 sellos como Vox/Lux (Bahía Blanca), Club Hem (La Plata), Tren en Movimiento (Lomas de Zamora), Caleta Olivia (La Matanza), Mágicas Naranjas (Lanús) y Loco Rabia (Vicente López/San Nicolás), entre otros, del jueves 7 de mayo al domingo 10.
“Para muchas editoriales es muy importante la Feria del Libro de Buenos Aires porque significa las ventas de tres meses; va más de un millón de personas, más distribuidoras de todo el país y de varios países de Latinoamérica y el mundo; damos a conocer las novedades, nos reunimos con libreros, conocemos personalmente a los bibliotecarios, entre otras cosas fundamentales del cara a cara”, explica Matías Reck, de Milena Caserola, que exhibía parte de su catálogo en el stand colectivo “Todo libro es político” en el predio de La Rural.
“Que se haya suspendido tan prematuramente nos pareció muy bien, más allá de los problemas de todo tipo que ocasionó. Pero durante los días que se iba a hacer la feria no nos podíamos quedar de brazos cruzados, y además nos pareció que así estaríamos a tono con la decisión de digitalizar las compras de la CONABIP. Por eso entre un grupo de editoriales afines armamos la Feria del Libro en Casa, con maquetas de stands y formularios donde los lectores puedan recorrer (por la pantalla) el stand, las novedades y pedir libros que le llegarán a través del envío a domicilio una vez finalizada la Feria”, agrega Reck.
En FINDE habrá un ciclo de encuentros con grandes nombres de la historieta, como Luis Scafati, Mariana Ruiz Johnson y El Bruno. Manuel Moretti, el cantante de Estelares, conversará con Oscar Jalil sobre los cruces entre la música y las palabras. Las chicas de Leer Argentinos organizarán un torneo de poesía breve por Instagram. La editorial Mágicas Naranjas armará un ritual de encuentro digital para niñas, niños y familias. La gente podrá participar de un taller de encuadernación realizado por Fa Estudio y ver una lectura de Federico Leguizamón (Jujuy), Luciana Caamaño (Mar del Plata) y Douglas Diegues (Paraguay), curada por el Festival de Poesía Latinoamericana de Bahía Blanca. Brenda Algozino de @DimeQueLees recomendará libros junto a Florencia Scarpatti. También habrá un panel sobre “El futuro de las ferias” con Alejandro Dujovne (CONICET), Víctor Malumián (FED), Pablo Amadeo (ASPO), Vero Luna (CONICET/UNLP) y Paula Brecciaroli (La Coop).
En La Feria del Libro en Casa, entre las actividades que se realizarán vía Instagram Live o Zoom, se destacan la presentación de Fracasos del ego, de Clau Bidegain, un libro de poesía no binario; y Modo Muñoz, espectáculo de Liliana Vitale con textos y poemas de Alberto Muñoz. También se presentarán los resultados del estudio sociológico “El sector editorial argentino en cuarentena” de Daniela Szpilbarg, investigadora del CONICET-IDES; “El interior también edita. ¿Cómo es editar en una ciudad del interior?, una conversación entre editores y escritores pergaminenses (Milena Caserola Pergamino); “Volver al papel y a los bares: narrativa argentina en la era digital”, con Matías Segreti, Santiago Martínez Cartier, Laureano Herger y Eduardo Malach; y “¿Hacia dónde va la industria editorial independiente?”, con Jacqui Casais, autora de la editorial Piloto de Tormenta.
El editor de Milena Caserola precisa algunas “ventajas” de la Feria del Libro en Casa: “No hay que pagar metros cuadrados ni apretarse para poner los libros en estanterías compartidas, ni charlar en asamblea cómo armar el stand”, enumera Reck. “Partimos de una imaginería digital, donde cada editorial diseñó el stand a su gusto. Crear con la libertad que nos dan las herramientas digitales, aunque lo que más nos gustaría es ir con la valija llena de libros a la Rural –confiesa el editor-. Seguramente no faltará algún brindis en los stands virtuales, pero el vino lo toma cada uno en su casa”.