El flamante titular de la Unión Tranviarios Automotor local, Sergio Copello, no pudo haber tenido una semana más dura desde que acompañó a Manuel Cornejo al frente del gremio de los choferes: primero fue la sorpresiva muerte del histórico líder y ahora una coyuntura económica generada por la cuarentena, que puso en jaque la recaudación de las empresas de transporte urbano de pasajeros, que derivó en la paga parcial de sueldos. Ayer los colectiveros descubrieron que tenían sólo el 35 por ciento del sueldo depositado e hicieron encender las luces de alarma: a primera hora del día Copello-secretario adjunto del gremio- debió enfrentar los micrófonos de los medios locales y adelantar que estaban pensando en un paro para las próximas horas. La cuestión en rigor, está afectando a todo el país, y por ende había mucha expectativa con una reunión entre la cartera de transporte nacional y el líder de la UTA nacional, Roberto Fernández que finalmente pasó a un cuarto intermedio. El aumento de los subsidios nacionales parece ser la única fórmula que podría destrabar el conflicto.
A media tarde llegó un poco de calma, cuando el gremio local anunció que para hoy se completaría la mitad del salario de los choferes, y a la esperra de una solución de fondo, la medida de protesta quedaría postergada para el próximo lunes.