Desde el jueves, una día antes de los anuncios del presidente Alberto Fernández, Salta volvió a una cuasi normalidad luego de 47 días de encierro. Fue la primera provincia en decretar su cuarentena (el 19 de marzo) y una de las primeras, junto a Jujuy, en prácticamente levantarla autorizando pasar a la fase 4 de la administración del aislamiento.
Ayer por la mañana una marea de barbijos circulaba por la ciudad, su mercado central y peatonales, rompiendo con la nueva normalidad de calles vacías a la que acostumbró la pandemia. Las filas en cada local comercial también se convirtieron en una postal del centro salteño.
El ingreso a los comercios era de uno por vez, mientras una persona los esperaba con un rociador en la puerta y les pedía celeridad en la compra. Esa será otra de las reglas a la que la población deberá acostumbrarse en la post pandemia.
Sólo la prohibición de circular en transporte público y los dispositivos policiales ubicados al ingresar a Salta y a las dos peatonales más concurridas (Florida y Alberdi), verificando si el documento coincidía con el día correspondiente para salir, lograron que la capital provincial no colapse.
Los parlantes del Mercado San Miguel informaban que a partir del martes todos los locales se encontrarían abiertos y habilitados para la venta y solicitaban a los concurrentes "un aplauso para todos los salteños" por los logros conseguidos.
“Ayer (por el viernes) hubo más gente, y el lunes o martes ya van a abrir más locales y esto se va a llenar”, aseguraron dos vendedoras de un local de lencería apostado en la vereda del mercado mientras esquivaban a quienes caminaban por allí.
Peluquerías, tiendas de ropa y telas, fueron las más concurridas y ni siquiera el sector gastronómico, uno de los pocos no exceptuados, se limitó a la hora de abrir. Aunque sin mesas, vendían al paso a los transeúntes.
Centros comerciales y shoppings también volvieron a abrir sus puertas con protocolos específicos de ingreso y egreso y con los patios de comida cerrados para el consumo en el lugar. En este caso abrirán de lunes a sábados de 12 a 20 únicamente.
El movimiento también volvió a notarse en localidades aledañas a la capital, como Vaqueros, La Caldera o San Lorenzo. Ésta última, fue la única hasta aquí en solicitar y conseguir a través del Comité Operativo de Emergencia, el permiso para salidas recreativas.
Los residentes de San Lorenzo podrán realizar breves salidas de esparcimiento peatonales, en bicicleta o a caballo hasta los mil metros de su domicilio (que debe constar en su DNI). Sin embargo, pocos estaban aprovechando ese privilegio en una de las villas residenciales más exclusivas de Salta.
Algunas familias salieron a dar una vuelta en bicicleta o a pasear sus mascotas, mientras que otros, los menos, hacían ejercicios en los espacios recreativos ubicados sobre la ciclovía.
En cambio, sí se vio más gente acudiendo a hacer compras en locales que se mantuvieron cerrados durante las primeras etapas de la cuarentena. Una inspectora municipal que estaba realizando tareas de control de locales, respondió a Salta/12 que “la gente en general se está comportando muy bien y respeta los protocolos de cuidado sanitario tanto para concurrir a los negocios como para salir a pasear un rato”.
En Vaqueros y La Caldera, dos municipios que se encuentran sobre la ruta nacional 9 que va a Jujuy por el camino de cornisa, el control policial ya no es tan estricto como hasta hace una semana, y el movimiento interno del pueblo ya es el habitual a la pre pandemia, a excepción de las ferias de fines de semana que no fueron exceptuadas.
Con respecto a las salidas recreativas, los dos intendentes contestaron a este medio que aún lo están evaluando, pero que probablemente las solicitarán al COE en el transcurso de la semana.
El miércoles a la noche el gobernador Gustavo Sáenz informó que a partir del día siguiente se seguirían flexibilizando rubros como el comercio, gracias a la situación epidemiológica que indica que no hay circulación interna del virus SARS-CoV-2. Aunque indicó que seguirían en revisión los sectores de la gastronomía, las salidas recreativas, continuará prohibido el uso del transporte público para la población en general y se reforzarán las fronteras y los límites provinciales.
También liberó la circulación de las personas no exceptuadas pero de manera controlada a través de las terminaciones del DNI, lunes, miércoles y viernes, números pares; martes, jueves y sábado, impares. Al ingresar a cada pueblo y a la ciudad de Salta, en los controles policiales se solicita el documento y se permite pasar sólo a los que tienen los correspondientes, o a quienes estén exceptuados según su ocupación.
Salta tuvo sólo cuatro casos de Covid-19 confirmados y todos fueron de personas que llegaron del exterior o provincias con circulación interna. Tres ya fueron dadas de alta y el cuarto se encuentra estable.
Gastronomía y turismo esperan su turno
Dos de los sectores de la economía que más sintieron el impacto y que aún no fueron exceptuados son la gastronomía y el turismo. Ayer el ministro de Gobierno, Ricardo Villada, anunció una nueva línea de crédito y anticipó que en el transcurso de la semana solicitarán al Ejecutivo nacional se liberen estas actividades.
La idea del gobierno provincial es reabrir bares y restaurantes con protocolos de atención y poder restablecer la circulación entre algunas provincias del NOA con la misma situación epidemiológica que Salta (Jujuy y Catamarca), para ir reactivando el turismo interno.
“Viendo la situación sanitaria de la provincia en materia de los pocos casos de coronavirus que se registraron, podemos solicitar que la próxima semana se liberen más actividades, en donde la gastronomía sería una de las principales”, explicó el funcionario provincial.
En cuanto a las líneas de crédito, el ministro de Economía, Roberto Dib Ashur, informó que a partir del lunes estarán a disposición del sector tres líneas de créditos. Una de hasta $400.000 a través del Consejo Federal de Inversiones (CFI) a una tasa que ronda el 8%; la que ofrece el Gobierno nacional de hasta $250.000, con tasa del 24 % que se tramita en el Banco Macro, y que para este sector será subsidiada por el gobierno provincial en un 12%, y por último, una línea destinada a las micro Pymes, de hasta $50.000, con una tasa cero, con fondos provinciales.