Un sismo que no provocó daños ni víctimas hizo temblar a Roma en la madrugada de este lunes y provocó que centenares de personas de la capital italiana salieran a la calle, en medio de una tormenta eléctrica pese a las medidas de distanciamiento social vigentes por el coronavirus
El sismo, de 3.7 grados de magnitud, con epicentro a 11 kilómetros al noreste de la capital (en Guidonia Montecelio, municipio romano en la región de Lacio), se sintió a las 5.03 de la mañana (cinco horas menos en Argentina) y despertó a miles de personas que de inmediato volcaron su preocupación en las redes sociales.
Los bomberos afirman haber recibido cientos de llamadas telefónicas de personas preocupadas por el temblor, que buscaban información acerca de lo que estaba sucediendo en la capital italiana.
El movimiento, que tuvo una profundidad de 10 kilómetros según la estimación del Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología, fue precedido por un fuerte sonido que sobresalió en el medio de una noche con tormenta eléctica, rayos y lluvias por varias horas.
El sismo se sintió con fuerza en zonas de toda la ciudad, incluidas las cercanías del Vaticano, pero no provocó daños ni heridos, según los primeros reportes de los equipos de rescate, aunque provocó temor entre los romanos, que salieron a la calle en plena madrugada, sobre todo en los barrios periféricos del noreste de Roma.Pese al susto generalizado de los romanos, Protección Civil aclaró que la magnitud del temblor "fue relativamente débil". En las redes sociales, la etiqueta #terremoto se conviritió rápidamente en tendencia. En principio, la población romana creía que se había producido una explosión.