Un imperio nacido de un vulgar robo, no de un objeto si no de una idea billonaria. Así se puede resumir Hambre de poder, película dirigida por John Lee Hancock que relata la historia de Ray Kroc, un simple vendedor de Illinois que en 1955 se convirtió en el fundador de la cadena de restaurantes de comida rápida más importante del mundo y que llegó a ser el símbolo del capitalismo: McDonald's.
Este drama biográfico con toques de humor cuenta cómo en la década del 50, Kroc se topó en una de sus recorridas de ventas con Richard y Maurice McDonald, dos hermanos que llevaban adelante una humilde hamburguesería en San Bernardino, al sur de California. Impresionado por la velocidad del sistema de cocina de este local rutero, Kroc visualizó el potencial de convertirlo en una franquicia, algo que los hermanos rechazaban porque preferían mantener la calidad de su servicio. Sin embargo, Kroc se fue posicionando hábilmente para luego arrebatárselos de manera definitiva -quedándose hasta con el nombre- y crear su propio imperio gastronómico.
Sin promocionar y vender la idea clásica del "sueño americano", la película muestra la ambición y la impiedad de un hombre capaz de todo con tal de conseguir lo que quiere, amparado por un sistema que habilita este tipo de maniobras y que recompensa el oportunismo y la ventaja por sobre el trabajo y la dedicación. Todo vale cuando se trata de ganar dinero.
El film cuenta con la actuación protagónica de Michael Keaton que se destaca en su papel de Kroc, como un hombre cegado por la ambición y el deseo de ser reconocido, y también cuenta en su elenco con Nick Offerman, John Carroll Lynch y Laura Dern.
Hambre de poder, John Lee Hancock, disponible en Netflix.