A la californiana (de padres taiwaneses) Alice Wu le llevó dieciséis años poder encarar su segundo largometraje como realizadora luego de Un amor diferente (Saving Face, 2004), que nunca tuvo un estreno comercial en la Argentina pero sí fue editado en pleno apogeo de las ediciones hogareñas en dvd. Algunos de sus temas son recuperados en Si supieras (curioso título local para The Half of It): la experiencia de las primeras generaciones de hijas de inmigrantes y la posibilidad de que las relaciones sentimentales no pasen necesariamente por el normativo “chico busca chica” o viceversa.
La reluciente oferta de Wu es un particular relato de crecimiento y una comedia romántica a la cual se le han eliminado sus rasgos superficiales más característicos. El otro referente ineludible es –como el espectador adivinará velozmente– el clásico drama heroico Cyrano de Bergerac, con sus cartas amorosas dictadas por terceros en la oscuridad del anonimato. Y si bien Ellie Chu (la actriz Leah Lewis, físicamente nerdizada para la ocasión) no posee ninguna nariz prominente, su incomparable inteligencia, una más que evidente timidez y, desde luego, su origen étnico no la han transformado precisamente en la alumna más popular de la high school.
Afortunadamente, Si supieras no es una película cruel con su protagonista y un grito de “chu chuuuuuu” al pasar, como si la joven fuera un convoy ferroviario, es lo más cercano al bullying que el guion llega a representar en pantalla. Al fin y al cabo, más allá de su apellido, Ellie Chu vive literalmente en la parada de trenes del pueblito de Squahamish, donde su padre viudo es algo así como el jefe de estación y ella la principal asistente. Las estupendas notas escolares le permiten desarrollar otro rol muy activo: escribir los informes especiales y ensayos para prácticamente la mitad del curso, por un módico precio en dólares. Hasta su profesora es consciente del engaño, exclamando con admiración un “has producido seis aproximaciones diferentes sobre la figura de Platón”, antes de pasar por alto la falta y rogarle que se inscriba en una universidad más prestigiosa que la local.
En esos primeros minutos, descriptivos y tan amables como casi todo lo que vendrá, Wu construye los pilares narrativos: el imposible triángulo formado por Aster, la chica linda pero ultra religiosa, para colmo hija del pastor; su enamorado Paul, jugador del equipo de fútbol americano, tan tosco con las palabras como torpe en el manejo de las emociones; y la propia Ellie, excelsa redactora de cartas de amor (en papel y tinta o en las redes sociales) y eventual sustituta de Paul a la hora de encantar a Aster con el antiguo arte de las palabras.
El inmortal concepto de “media naranja”, referenciado indirectamente en el título original, es reconstruido en una bella secuencia de animación al comienzo del film, pero a partir de ese momento Si supieras se esfuerza por desechar esa idea. No hay aquí promesas de amor eterno ni mucho menos y cada momento en el cual el guion parece deslizarse hacia el terreno del clisé es raudamente reconvertido en otra cosa. Desde luego, el enamoramiento de Paul es poca cosa en comparación con el convencimiento creciente de Ellie de su metejón total (físico, emocional, intelectual) con Aster.
En el tránsito –casi nunca previsible– del engaño, los enredos y su inevitable desenmascaramiento, Si supieras entrelaza citas al cine de Hollywood clásico con referencias a Oscar Wilde y la escucha más inesperada (y emotiva, sin ironía alguna) de esa balada inoxidable de Chicago, “If You Leave Me Now”. Sin rendirse a las correcciones políticas o a representaciones normativas del colectivo LGBT, Wu entrega un retrato sensible e inteligente sobre la posibilidad concreta de ser feliz a partir de las diferencias. Cualquier clase de diferencias.
SI SUPIERAS 7 puntos
The Half of It; Estados Unidos, 2020
Dirección y guion: Alice Wu.
Duración: 104 minutos.
Intérpretes: Leah Lewis, Alexxis Lemire, Daniel Diemer, Enrique Murciano,
Becky Ann Baker.
Estreno en Netflix.