La "fatiga ante la pandemia" pone en peligro la lucha contra la covid-19, advirtió la Organización Mundial de la Salud (OMS), que instó a mantener la vigilancia, cumplir con las indicaciones y seguir con las medidas de precaución.
"La fatiga por las restricciones amenaza los valiosos triunfos que hemos obtenido contra el virus. La desconfianza de las autoridades, las teorías de la conspiración y alimentar movimientos contrarios al distanciamiento social y físico" ponen en peligro a nuestras sociedades en un momento clave, advirtió el director regional de la OMS para Europa, Hans Kluge.
Katrine Habersaat, técnica de la OMS especializada en comportamiento social, explicó que este cansancio que se va notando de las sociedades ante la pandemia y sus consecuencias "se está expresando de formas distintas en diferentes países".
Señaló que la fatiga se manifiesta en "la salud mental, afectada por el aislamiento, la imposibilidad de tener el apoyo social que se tiene normalmente, con la situación económica y la necesidad de llevar pan a la mesa". También mencionó factores culturales o sociales.
Kluge advirtió que "el comportamiento que tengamos hoy, cuando empiezan a levantarse las restricciones", determinará el curso de la pandemia y "qué camino seguimos: uno que nos lleve a la nueva normalidad o uno que nos lleve de vuelta a las restricciones de movimiento y de interacciones sociales". Por ello, instó a "seguir las recomendaciones de las autoridades nacionales, limitar las interacciones sociales, lavarse las manos, mantener distancia física y reducir riesgos para los más vulnerables".
“No hay lugar para la complacencia", advirtió Kluge en un pedido a mantenerse vigilantes justo cuando muchos países comienzan a levantar las restricciones. Recordó que "en la última semana han emergido grupos (de infectados) en sitios como Wuhan (China) y Corea del Sur, donde el virus parecía haber desaparecido, un recordatorio de que la amenaza de que resurja el virus nunca está lejos".
Agregó que “hasta que una vacuna o un tratamiento estén disponibles para todos, limitar el virus requiere un acuerdo entre la gente y los políticos, un contrato social que va más allá de los países o los líderes".
Podría ocurrir que el Sars-CoV-2 (como se denomina científicamente el nuevo coronavirus) "se convierta en un virus endémico, como otros virus estacionales del grupo de los coronavirus, y otra opción es que pueda mutar", y hay que vigilar de cerca "cómo se comporta el virus, cómo se comporta la población humana, y las intervenciones sobre las que podemos influir", alertó. "No es momento de celebraciones, sino de preparativos", afirmó el especialista.
También instó a los gobiernos a "escuchar" a sus poblaciones, ganarse su confianza y hacer una comunicación efectiva de lo que sucede.