"Queremos a la policía en la calle. Policía que no trabaje en la calle, policía que se va". Lo dijo el ministro de Seguridad, Marcelo Sain, tras la intervención de la Jefatura de la Unidad Regional I de la ciudad de Santa Fe, donde ayer puso al frente -por primera vez en esa dependencia- a una mujer. La resolución que se confirmó en las últimas horas del miércoles tuvo que ver con irregularidades en la regional. Ahora Marcela Muñoz, quien estaba a cargo de la Dirección y Coordinación de Gestión Judicial, será la jefa.
"Hay cuestiones que a las mujeres nos cuestan el doble y hoy veo esto como un reconocimiento y una responsabilidad. Tenemos que trabajar para reestablecer la operatividad y restituir la confianza en la policía", señaló Muñoz.
"Tomamos esta decisión porque no nos gusta la modorra operativa, queremos a la policía en la calle trabajando. Aprendí que o se es policía o se es delincuente. Las dos cosas al mismo tiempo, no; así que prefiero que el que no esté dispuesto a trabajar de policía contra el delito, se dé media vuelta y se vaya a la casa. Lo mejor es que se vaya renunciado; la otra alternativa es que se vaya esposado. Se acabó el vínculo entre policía y delito", dijo el ministro en el acto de ayer en la ciudad capital. Y sumó: "Tengo plena confianza en Marcela, por eso está acá".
Muñoz tiene 29 años en la fuerza y también es trabajadora social. "Es una gran responsabilidad, sobre todo como mujer, este reconocimiento", dijo. En su carrera policial pasó por áreas como la de Trata y otras relacionadas con la temática de género. Cuando le tocó presentar su ascenso, para directora de policía, lo hizo con un trabajo sobre la falta de mujeres en los puestos de poder. "Vamos llegando, empezó a verse, y hoy es un reconocimiento y una responsabilidad. Creo que es una política de este ministerio y es valorable", aseguró.
El secretario de Seguridad, Germán Montenegro, dijo más temprano en LT8 que los motivos de la intervención de la unidad en la que estaba Daniel Filchel, tienen que ver con que "se observaron falencias en el desempeño operativo, cierta modorra; y observamos cierto movimiento vinculado a posibles organizaciones narco que históricamente operaron en la zona. Tenemos la sensación de que se estaba reconstituyendo algún sistema de esas características en función de algunos indicios. Además, ocurrieron una serie de hechos delictivos en los que hubo muy poca capacidad de respuesta policial y actitudes poco claras: incidentes que no eran comunicados en tiempo y forma al MPA, y una serie de situaciones que estimamos que no pueden ocurrir", indicó sobre sucesos que están bajo investigación judicial.
Sobre el recambio, que implica poner al frente a una mujer, dijo que "Muñoz tiene una vasta experiencia como funcionaria policial, que estuvo en la oficina que da protección y vigilancia a los Tribunales y la Oficina de Gestión Judicial, con unos 600 efectivos. Es una persona honesta que nos merece respeto profesional".
En cuanto a la situación de la policía en Rosario, señaló: "Más allá de los déficit que pueda haber, observamos actitud operativa. Los jefes (de esa unidad) son personas que valoramos muchos porque están permanentemente en la calle y dirigiendo los elementos operativos, atendiendo los problemas con una rapidez como no veíamos en la URI. Estamos conformes con el desempeño, disconformes con la situación de violencia que se vive y es lo que estamos tratando de atender", indicó.