Luego de tres días de paro, los trabajadores municipales del pueblo de Hipólito Yrigoyen del departamento de Orán irán a conciliación obligatoria con la actual gestión de Alfredo Sosa. La cita quedó pactada para el martes 19 a las 11 en la delegación de la Secretaría de Trabajo de Orán. Los empleados piden el incremento del 30% en los sueldos de la planta permanente y elevar a $130 el pago por hora para los trabajadores del programa PROMAS.
“El 10 de marzo hicimos un petitorio con diez puntos, uno de ellos es un 30% de suba sobre los valores remunerativos y no remunerativos de nuestros sueldos”, contó el secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) en Yrigoyen, Arnaldo “Perón” López. Los empleados le propusieron al jefe comunal que este incremento pueda pagarse en tres cuotas o que se dé un monto fijo de 9 mil pesos también en tres cuotas. La suba se pide para los 88 trabajadores de planta permanente que tiene el municipio norteño.
López contó que también solicitan el aumento en el pago de las horas del personal del Programa Municipal de Asistencia Social (PROMAS). El programa, que nació de la mano de Nicanor Sosa, hermano del actual jefe comunal, reúne a 105 trabajadores que actualmente cobran $82 la hora de trabajo dentro del municipio.
Tras las medidas de fuerza que adoptaron los trabajadores, ATE y la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN) junto a la gestión municipal deberán asistir a las reuniones en el marco de la conciliación obligatoria dictada el 13 de mayo por la Secretaria de Trabajo de la provincia de Salta.
“Nosotros llevamos propuestas, hicimos reuniones y hemos dado distintos ofrecimientos para mejorar la situación, pero no veíamos una contrapropuesta por parte del intendente”, afirmó el secretario general. Sosa les informó “que no tenía dinero y que estaba sufriendo recortes en el municipio”, por lo cual los empleados decidieron iniciar medidas de fuerza.
Durante las jornadas de protesta también cuestionaron que el intendente haya dicho no tener dinero, pero cuando inició su gestión “la planta de empleados se duplicó”. “Seguramente era compromiso político en campaña”, enfatizó López. Para el gremialista, “si nos dicen que no tienen plata, pero por otro lado ingresan gente, eso no es coherente”.
Ambos gremios se quejaron por la creación de secretarias en la nueva gestión. “Yrigoyen funcionaba con cuatro secretarías, hoy ese número se duplicó junto a la planta de funcionarios y nos quieren hacer pagar el costo a nosotros por los compromisos de él”, aseguraron.
Las protestas tomaron fuerza el jueves 7. Desde la municipalidad se afirmó que los trabajadores habían percibido un incremento en los sueldos. Pero López, aclaró que se trató del 8% sobre el básico. “Nuestro básico oscila entre los 6 y 7 mil pesos y ese porcentaje representaría unos 500 pesos nada más”, recriminó el dirigente gremial. “Es una aberración”, manifestó.
López contó que en gobiernos anteriores “siempre se acordó sobre lo remunerativo y no remunetivo para ver reflejado realmente en los salarios”. Detalló que en los montos de los básicos se perciben los descuentos y que con el incremento del 8% de Sosa, “solo nos alcanza para comprar un kilo de carne”.
Ante el dictado de la conciliación obligatoria, los empleados debieron cesar con el paro y retomar sus actividades mientras que el gobierno municipal no deberá tomar represalias contra ellos.