Primero fue pasar la cuarentena. El desafío siguiente fue una reactivación inteligente y progresiva de la actividad económica. Y se inició la etapa en la que hay que empezar a enfrentar el daño que dejó el fenomenal parate a causa del aislamiento social, preventivo y obligatorio.
En ese sentido los industriales santafesinos nucleados en Fisfe y el gobierno provincial iniciaron gestiones para abordar la problemática que supone el pago de los consumos de electricidad. Una de las alternativas que está sobre la mesa es que la EPE cobre por lo efectivamente consumido y no por lo contratado previamente, como medida excepcional y para ayudar al sector a pasar la situación.
El Departamento de Energía de la Federación de Industriales de Santa Fe presentó solicitudes para flexibilizar el régimen de potencia, es decir que no se tenga que abonar el cargo fijo ante la situación extraordinaria y sólo se pague por la electricidad efectivamente consumida.
"También hemos solicitado que las deudas que se generen por esta situación de la pandemia puedan ser abonadas con planes de pagos específicos", indicó Alberto Rosandi, director del Departamento de Energía de Fisfe.
Rosandi explicó que el Ente Nacional Regulador de Electricidad (Enre) "días atrás emitió una resolución en ese sentido para las jurisdicciones donde tiene injerencia (no es el caso de Santa Fe) y también Cammesa (administra el mercado eléctrico mayorista) hizo lo propio flexibilizando los pagos".
"Esperamos respuestas y medidas similares en la provincia de Santa Fe a corto plazo", explicó Rosandi. En Córdoba, las gestiones en el mismo sentido están muy avanzadas entre industriales y la Epec.
Cómo aliviar la situación de los actores económicos, en este caso los industriales, se analiza en base al comportamiento del consumo durante la pandemia, con datos precisos que permiten tener información fiable sobre la verdadera dimensión de las dificultades que atraviesa el sector.
Según datos de Cammesa, el consumo chico residencial cayó 1,4% en abril con respecto a igual mes de 2019. En la categoría de consumos intermedios, que abarca comercios chicos y grandes y las industrias pequeñas, la caída fue de 9,8%. Y entre los grandes consumidores, donde se concentra la gran demanda industrial, la reducción, abril contra abril, fue de 25,4%.
En el conjunto, la caída promedio de consumo eléctrico en abril en en el país fue del 11,5% según datos Cammesa.
Cabe recordar que el DNU presidencial impuso la cuarentena a partir del 20 de marzo. Esto implica que abril fue el único mes hasta el momento atravesado de punta a punta por la medida. Pero también cabe recordar que las industrias esenciales mantuvieron su funcionamiento, y que en abril varios sectores fueron volviendo de a poco a la actividad.
Un aspecto que señalan los industriales es que la problemática de la pandemia en realidad profundizó un contexto adverso en el que se venía desenvolviendo el sector, con 23 meses de descenso de la producción industrial.
Hace 7 días, el informe mensual de actividad industrial de Fisfe arrojó una caída extraordinaria del 17% en la producción durante el mes de marzo, con perspectiva de mayor descenso en abril que hasta ahora fue el mes núcleo de la cuarentena.