El presidente de Francia Emmanuel Macron hizo un mea culpa por su política de salud. "Sin duda, cometimos un error en la estrategia anunciada hace dos años", dijo el jefe de Estado. Los trabajadores de la salud fueron uno de los colectivos más visibles en las manifestaciones de los últimos tiempos contra el Ejecutivo. El mandatario visitó un hospital en París y algunos trabajadores lo criticaron duramente. Enfermeras le dijeron que apenas llegan a cobrar 1.000 euros de sueldo, 500 por debajo del salario mínimo. Esto las obliga a tener que tomar otro empleo en el sector privado, especialmente en la capital. Macron reconoció que el plan de salud que su gobierno aplica desde 2018 no alcanza. "Es muy cruel para mí mismo, era una súper estrategia pero que debía haberse hecho diez años antes", sostuvo el presidente. Unas horas antes había publicado un decreto para otorgar una prima de entre 500 y 1.500 euros dirigido a los trabajadores de los hospitales más afectados por la epidemia.

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