Aunque la pandemia parezca suspenderlo todo, la vida sigue. Y los nacimientos también. Hasta el 24 de mayo se conmemora la Semana Mundial del Parto Respetado, una iniciativa que nació en 2004 y este año tiene como lema "Mi decisión debe ser respetada". Desde el Observatorio de Violencia Obstétrica de Rosario (OVO Rosario) reciben de forma permanente consultas por la vulneración a un derecho establecido por ley nacional, provincial y ordenanza municipal. "Este año cae justo en este contexto pandémico terrible, donde existe una vulneración del derecho básico de estar acompañada en el parto, nacimiento, y en todo el proceso, que está siendo totalmente vulnerado, en todos los ámbitos, público y privado. Como activistas entendemos el contexto pero también como mujeres entendemos la necesidad de esa persona gestante de estar acompañada en este momento trascendental de su vida", apuntó Julia López Barraza.

Por su parte, Andrea Caminotti puntualizó que en realidad, este contexto evidenció algo que ya ocurría. "Observamos que se dan dos dimensiones cruzadas. Por un lado, hemos recibido montón de mensajes no sólo de Rosario, sino también de la región, de lugares cercanos incluso de otras provincias. Pero se da una doble situación, porque vemos que estos derechos ya estaban siendo vulnerados, no fue muy grande la modificación". Para López Barraza, la pandemia "es la excusa perfecta, para decir ahora no se puede".

Sobre la necesidad del respeto de los derechos de personas gestantes y recién nacidas en el momento del parto y el nacimiento, las activistas recuerdan que "no es una ayuda o un capricho, sino un derecho". Y apelan a un concepto de salud integral. "A medida que se va cambiando el paradigma de los nacimientos hacia un paradigma más respetuoso, más saludable, también estamos hablando de salud comunitaria, y en ese sentido también es un acto de prevención primaria de la salud", considera Caminotti. 

Para María Soledad Mendoza, es importante subrayar que no existe ninguna resolución oficial contra el parto respetado en el marco de la pandemia. "No ha salido ninguna resolución o decreto nacional que invalide lo que contempla la ley. Están violando la ley de parto respetado, entonces, no hay que dejarlo en el terreno de la necesidad personal. El Ministerio de Salud recomienda y sacó un protocolo de cómo esa persona debe ser acompañada", apunta Mendoza mientras Liza Nasio también subraya "la importancia de estar acompañada para la salud mental de esa mujer es inexplicable y también para el recién nacido, para el desarrollo biológico de ese bebé". 

López Barraza enfatiza que la medicalización del parto y el nacimiento puede discutirse. "El escenario de un parto-nacimiento siguen siendo las instituciones de salud, cuando en la mayoría de los casos es una situación totalmente fisiológica, biológica que hay que acompañar. Esto pone en evidencia que tenemos mal puesto el eje de dónde permitimos que se suceda un parto-nacimiento. Se necesitan casas de partos para cambiar el escenario", es una propuesta concreta y señala que "eso pone al profesional que interviene en un acompañamiento de un parto nacimiento, que no debería solo obstetra, debería haber una partera, que es la persona académicamente preparada para un parto fisiológico sin complicaciones, si hay algo que se complica, que no puede solucionar la partera, ahí viene el obstetra". La propuesta es integral. "También debería haber todo un equipo capacitado y formado en esta mirada, desde este lugar. Que el neonatólogo sepa la importancia de la hora de oro, qué significa eso. Porque si no, siempre nos corren con que hay protocolos por una cuestión de salud, cuando el parto-nacimiento es un acto biológico. Los partos son institucionales hace menos de cien años", agrega.

"Tenemos mal puesto el eje de dónde permitimos que se suceda un parto-nacimiento. Se necesitan casas de partos para cambiar el escenario" López Barraza

Las activistas subrayan que los protocolos restrictivos de muchas instituciones de salud violan la ley. "Lo que se pone en tela de juicio, lo que se cuestiona, es el paradigma médico hegemónico que medicaliza el parto, lo patologiza. Y poner el foco en que el parto es un momento de la vida sexual y reproductiva, fisiológico, que no necesita ser intervenido, sí necesita ciertos cuidados, cierta intimidad, pero que no necesita la intervención. Los protocolos, las intervenciones rutinarias, lo que hacen es intervenir en algo que tiene una evolución fisiológica natural", apunta Mendoza, y recuerda que "los protocolos internos de una institución no pueden ir en contra de la ley nacional". La ley es la 25.929 .

Sobre el actual contexto, plantean que "hasta el momento no hay ninguna indicación de los organismos de salud para separar a mamá-bebé" y que "se sigue recomendando la lactancia desde el momento cero aún en casos confirmados de covid-19, ya que no hay casos de transmisión vertical".

Desde OVO Rosario también ven la oportunidad. "Hay que pensar en la posibilidad de consolidar una opción de parto domiciliario… de parto planificado en domicilio, hoy ni siquiera te dan esta opción, queda dentro de las posibilidades de cada familia y hay un impedimento, porque en algunas obras sociales se pueden hacer gestiones para que reintegren el dinero, pero se requieren de muchos otros recursos. Lo cierto es que se tiene que cubrir el parto, independientemente de donde sea, independientemente de si se da en una casa, en una casa de nacimiento, en una institución, y de poder justamente volver a que esta opción de parto planificado en domicilio sea realmente una opción para elegir y no quede en una minoría, que si bien es cada vez es más fuerte, es una minoría", cuenta Caminotti. Por eso, "el contexto de pandemia ha traído una modificación importante, porque abrió la puerta, porque hemos recibido diferentes consultas acerca de las posibilidades de parto domiciliario. Las familias y las personas se dieron cuenta de que las instituciones no garantiza ese ideal de seguridad. Muchas familias están preguntándose sobre la posibilidad de un parto en casa y también algunes profesionales que se están preguntando por esta opción. Incluso que han acompañado, cuando en otro contexto no habían acompañado nacimientos domiciliarias. Esta pandemia también quiebra este paradigma que estaba vigente del sistema hegemónico de atención". 

Por eso, las activistas ponen a disposición de quiénes les consultan que "hagan un plan de parto, que es algo que está dentro de la ley, y ofrecemos enviárselos, lo mandamos por mail a las que nos pidan, y en el modelo de plan de parto hay un apartado de la pandemia, pero es algo que se puede hacer siempre --explica Nasio--. También estamos mandando los documentos del Ministerio de Salud relacionados al embarazo, parto, puerperio, hay uno especial de acompañamiento, también recomendaciones OMS, también sugerimos para denunciar llamar a la línea 144 que están tomando denuncias por violencia obstétrica". Además, plantean que no se trata de combatir a profesionales de salud, sino de convocarles a un trabajo conjunto en pos de un parto respetado.

OVO Rosario está integrado también por Juliana Faggi y se puede contactar por mail a [email protected]; en instagram está como @ovoregionalrosario y en Facebook como Observatorio Violencia Obstétrica Rosario.