Un equipo integrado por alumnos de tercer y cuarto año de la facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) fue seleccionado como finalista de un programa espacial internacional que impulsa la aplicación de proyectos innovadores para nanosatelites.

La convocatoria se llama “Open Space” y es organizada por las empresas Satellogic y Academia Exponencial. Del concurso participaron más de 150 equipos de los cuales el conjunto platense quedó entre los cinco mejores. El 30 de junio se sabrán los ganadores que podrán construir un módulo espacial innovador o un nanosatélite que será puesto en órbita como parte de una misión de Satellogic que brindará energía y mejoras en las comunicaciones.

El proyecto presentado por el equipo “Proyecto BBG”, integrado por Aldana Guilera (ingeniería Aeroespacial), Emiliano Ballardini (ingeniería en computación) y Facundo Biaggio (ingeniería Aeroespacial) fue el de un sensor para medir tormentas solares a partir de las variaciones del campo magnético.

Consultada por el Suplemento Universidad, Aldana Guilera reveló que en un primer momento “el proyecto parecía lejano” y agregó: “Nos anotamos como para ir viendo hasta dónde podíamos llegar y nos encontramos siendo finalistas”.

“Lo que hicimos es crear unos sensores que miden magnetismo y calibrados correctamente permiten leer el campo magnético de la Tierra. Una tormenta solar es una perturbación de ese campo magnético; entonces, cuando hay una tormenta solar vamos a ver una interferencia, un valor distinto al que medimos normalmente, y de esa forma las vamos a localizar con mayor precisión”, explicó la estudiante de 22 años.

Una tormenta solar o geomagnética es un fenómeno que se da a partir de una erupción solar que libera partículas de radiaciones electromagnéticas que viajan por el espacio y chocan contra la Tierra alterando los sistemas de comunicación.

“Son fenómenos casi impredecibles porque se manejan con una gran velocidad: en 8 minutos llegan a la tierra y solo se miden con cronógrafos muy altos o adheridos a telescopios, por eso lo que proponemos es un análisis estadístico y que hasta el momento no existe”, aclaró Guilera.

La estudiante se entusiasma pensando en la posibilidad de lanzar su propio módulo pero, más allá de eso, hace hincapié en la importancia de la divulgación científica. “Nos interesaría que se sepa ya que es un prototipo muy económico que nosotros lo resolvimos con el presupuesto que contamos por parte de la fundación de la facultad y además se puede adherir a cualquier satélite. Cuantos más satélites en órbita haya, nos vamos a encontrar con una red de datos mayor y así poder realmente hacer un estudio estadístico para mejores investigaciones al respecto”, puntualizó.

El vicepresidente del Área Institucional de la UNLP y director del Centro Tecnológico Aeroespacial de la Facultad de Ingeniería y propulsor del proyecto, Marcos Actis, contó que este tipo de proyectos sirven para que los alumnos "piensen en soluciones que están pendientes de hacer e iniciarse en tecnologías realmente de punta y que demuestren que los chicos pueden hacer cosas de tan avanzada tecnología y que algo que ellos tengan en sus manos y lo trabajen pueda ser puesto en órbita”.

“Más allá del resultado, ofrecimos a los chicos poder tener un lugar en el futuro satélite universitario que buscamos lanzar a fin de año, pero con el tema de la pandemia se atrasó un poco”, contó.