Luis Sepúlveda, uno de los escritores chilenos más reconocidos, murió el pasado 16 de abril en la ciudad española de Oviedo , a los 70 años, víctima de coronavirus. Poco más de un més después de su deceso, una iniciativa del gobierno de Sebastián Piñera para homenajear al autor de Un viejo que leía novelas de amor no cosechó sino repudios: lanzó la primera edición concurso literario con el nombre de escritor y subtitulado "El coronavirus y yo".
El sitio web del ministerio de Ciencia da cuenta que la actividad es organizada por “el ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación y el ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio". Desde esta segunda cartera se desligaron y dijeron que la iniciativa era de Ciencia, aun cuando en el afiche difundido aparece el logo de los dos ministerios. En rigor, el concurso se anunció el 30 de abril, dos semanas después de la muerte del escritor, y la indignación afloró ayer.
El rechazo ha sido tan grande que el afiche y las bases del concurso ya fueron bajados de la web de la cartera de Ciencia en las últimas horas. Sin embargo, pese a haber sido borrados, circulan en las redes sociales. Las bases del insólito concurso en "homenaje" a Sepúlveda, víctima de la enfermedad (que lo tuvo internado 48 días antes de fallecer), eran las siguientes:
“El concurso incluye cuatro categorías: 4-7 años, donde los niños deberán dibujar una postal dirigida a quien el niño o niña quiera entregar, donde exprese su experiencia bajo la pandemia del coronavirus; 8 a 12 años, con una carta de una página máximo en papel tamaño carta. También puede ser leída en un video o escrita a mano con letra legible y fotografiada; 13 a 17 años de una carta que puede ser ilustrada y presentada de manera individual o en duplas. También puede ser leída en un video o escrita a mano con letra legible y fotografiada. Por último en la categoría adultos trata de una dedicada a un niño/a individual (real o ficticio), o a un colectivo (migrantes, pueblos originarios, escolares, entre otros)”.
El escritor fallecido por Covid-19 fue un activo militante de izquierda y su apoyo a la Unidad Popular a comienzos de los 70 le valió la cárcel cuando se produjo el golpe de Augusto Pinochet. Partió al exilio y no volvió a residir en su país. Amante del fútbol
, radicado en Gijón, se consagró como uno de los escritores más importantes en castellano de las últimas décadas y solía expresarse en las redes sociales, por lo general con posteos críticos y mordaces contra la derecha chilena en general y Sebastián Piñera en particular.
Los repudios se hicieron sentir en las redes: