En esta época de cuarentena, donde no hay partidos de fútbol ni pases de jugadores pero sí una nueva AFA con 6 vicepresidentes, el plantel de periodistas deportivos de Peligro de Wolf decidió aprovechar el fin de semana largo para viajar en su máquina del tiempo usada hasta el año 1810 y cubrir el evento revolucionario del 25 de Mayo de aquel año libre de pandemia, a modo de crónica deportiva:
CISNEROS FUE ELIMINADO DE LA COPA VIRREYES DE AMÉRICA TRAS PERDER LA REVOLUCIÓN DE MAYO CONTRA LA PRIMERA JUNTA.
En una tarde lluviosa, contra todo pronóstico, la Primera Junta dio el batacazo en el Cabildo y eliminó al entonces líder de la Copa Virreyes de América, Cisneros, jugando de local en la Plaza Mayor. Con este triunfo, los criollos obtuvieron la clasificación para jugar la final de la tan ansiada Copa Independencia, a disputarse en Tucumán en 1816.
La etapa inicial empezó con una Primera Junta que no salió a especular y buscó permanentemente el derrocamiento de su rival. Pese a todo, el equipo del Virrey se mostró superior y a la expectativa, buscando el contragolpe, confiado en que finalmente impondría su autoridad a la colonia insubordinada. En el complemento, el buen trabajo de la dupla Belgrano – J. J. Paso, la solidez de Saavedra más el empuje de Moreno llevaron a los locales al triunfo.
El conjunto patrio formó con Cornelio Saavedra en el arco, Juanjo Castelli, Domingo Matheu y Miguel de Azcuénaga en la línea defensiva. El Manu Alberti y Juanchi Larrea en el medio, su capitán Mariano Moreno de enganche y arriba J. J. Paso y Manuel Belgrano. El trabajo de la semana en la Jabonería de Vieytes –lugar de concentración de los criollos- se vio reflejado en el verde césped de la Plaza Mayor que, a pesar del diluvio, tuvo un lleno total. La arenga de la hinchada local fue constante. Comenzó con un tímido:
“Yo soy criollo desde que estaba en la cuna.
Al Gobierno Patrio yo lo quiero de verdad.
De la mano de Cornelio este año
todos juntos Revolución vamo’ a gritar”
Y cuando en la última parte el encuentro no se definía, el Pueblo criollo representado por la barra, arremetió con un cántico por demás contundente, dirigido a los cabildantes, para que definan el pleito:
“Somos del Virreynato
del Río de la Plata,
los que quieren saber
¿de qué corno se trata?”
Al finalizar el encuentro, con el resultado favorable, en conferencia de prensa los dirigentes patrios French y Berutti, también responsables de la organización del evento, manifestaron: “Fue una jornada gloriosa, la convocatoria del Pueblo también tuvo la respuesta esperada. Estamos felices por el resultado. Seguiremos transpirando las escarapelas para llegar lo antes posible a cumplir el objetivo: reforzarnos con algunos nuevos valores del interior y concretar el sueño de representar una Junta Grande. Un saludo a Mariquita Sánchez de Thompson y a todos los que me conocen”.
La victoria patria, generó una profunda decepción en la población española. “Me cortaron las piernas”, habría manifestado desde su búnker Baltasar Hidalgo de Cisneros, que huyó del Virreynato y fue despedido por la hinchada criolla con cántico por demás hiriente, que retumbó en todo el Cabildo y fue el comienzo de una gresca entre una vendedora de mazamorra y un coronel español:
“Mirá, mirá, mirá
sacale una foto,
se va para España
con el cutis roto”
Fue un clásico que se jugó con mucha intensidad. Cisneros sintió el golpe, fue con más empuje que ideas, y no pudo torcer la historia, que por el momento la siguen escribiendo los que ganan. Salvo que se meta el VAR y decida que las independencias americanas se definan por penales.