Los trabajadores de la Municipalidad de Salvador Mazza comenzaron un paro por tiempo indeterminado en reclamo por las paritarias paralizadas debido a la llegada del coronavirus al país y el decreto de necesidad y urgencia que ordenaba el aislamiento social obligatorio.
Los municipales reclaman un aumento del 40% y el pase a planta de unos 32 empleados contratados que ya reúnen los requisitos para poder ser incorporados como trabajadores estables del municipio.
“Esto arrancó alrededor del 5 de marzo, cuando presentamos un petitorio de recomposición salarial por 6 meses, pero por la pandemia se dejó todo sin efecto hasta la semana pasada”, explicó Fermín Hoyos, secretario general de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Seccional San Martín.
En el petitorio que le entregaron al intendente Rubén Méndez, le informaron que de no tener respuesta hasta el lunes 26, comenzarían con las medidas de fuerza. “El sábado nos acercaron una propuesta del 30% de aumento, a pagar a partir de mayo en tres tramos de 10%, que terminaría recién en julio, no remunerativo ni bonificable”, indicó Hoyos.
El dirigente gremial confesó que el porcentaje que ellos solicitaban “es negociable”, pero que no aceptarán que las propuestas sean no registrar esos aumentos, y aclaró que todos los trabajadores en asamblea rechazaron la oferta.
Con respecto al pase a planta, dijo que había un principio de acuerdo pero que la comuna se niega a incorporar a algunos trabajadores eventuales que ya llevan más de 10 años realizando sus actividades “en condiciones precarias, y según ordenanza, a partir de los 6 (años de trabajo ininterrumpido) ya se ganaron el derecho de ser incorporados”.
Según Hoyos, la intendencia les respondió que “no tienen plata suficiente” debido a la caída de la coparticipación y la baja de la recaudación por la cuarentena, “sin embargo, siguen incorporando gente en la planta política”, denunció, y añadió que “también están recibiendo jugosos montos de Nación por el Covid-19” .
El gremialista dijo que Salvador Mazza “es un municipio rico” por el movimiento de camiones de entrada y salida del país, que le dejarían “aproximadamente $150.000 por día de peaje”. Aunque reconoció que por la pandemia y el cierre de fronteras ese porcentaje de recaudación disminuyó, aseguró que se sigue cobrando una buena suma.
Hoyos informó que no acatarán la conciliación obligatoria solicitada por el municipio al Ministerio de Trabajo provincial, ya que lo considera una forma de dilatar la negociación y ganar tiempo, “no hay nada que conciliar en estos términos", aseguró.
El dirigente de ATE informó que Salvador Mazza es la única localidad del departamento que aún no acordó una recomposición con sus trabajadores. La semana pasada lograron un aumento del 35% en Tartagal, “todo remunerativo y bonificado, en cuotas del 10% retroactivo a enero y la incorporación de casi 100 compañeros”.
La respuesta del municipio
El secretario de Gobierno, Daniel Campos, dijo a Salta/12 que el 30% no remunerativo es lo único que pueden ofrecer, según él, porque es la localidad con el básico más alto de todo el departamento. “Es de $25.060”, por lo que para el funcionario, los sueldos son muy altos si se suma la antigüedad, “una agente con 25 años de servicio cobra alrededor de $60.000”.
Campos manifestó que las arcas municipales no podrían hacer frente a la carga impositiva que todo ese aumento significaría en términos de aportes patronales, jubilaciones y obra social. Y añadió que el sindicato pelea “porque allí entra el 2% de la cuota sindical”
Aunque aclaró que sí sería remunerativo en el caso de mujeres con 55 años o varones de 65, “como para que tengan un buen respaldo a la hora de jubilarse”.
Con respecto al pase a planta, el secretario de Gobierno confirmó que serán unos 39 empleados contratados los que ingresen automáticamente porque cumplieron los 6 años de trabajo ininterrumpidos.
Reconoció que hay “planilleros” con antigüedad superior pero no están en condiciones, según la ordenanza, y “pasar estos contratados a planta permanente me demanda unos $13 millones más si es que se aceptan los nueve que solicitan”.
Campos aseveró que el municipio está al día con todos los salarios y en regla con todos los requisitos de sus empleados, “pero algunos caprichos gremiales hacen que las cosas se pongan más difíciles”.
Por último, el funcionario ratificó que hoy solicitará la conciliación al Ministerio de Trabajo, y que todos los empleados tendrán la obligación de acudir a sus puestos de trabajo hasta que se realice la reunión prevista para el próximo jueves, 2 de junio, en la ciudad de Salta. Algo que el gremio ya informó que no acatará.