El asesinato de George Floyd a manos de un policía blanco en Minneapolis desató una ola de manifestaciones de protesta en los Estados Unidos, de la que deportistas de diferentes partes del mundo no quedaron al margen. Por un lado, a través de homenajes a la víctima y pedidos de justicia, pero también poniendo el cuerpo a la lucha en diferentes ciudades norteamericanas.

Un caso paradigmático es el de Jaylen Brown, escolta de los Boston Celtics en la NBA y ahora uno de los líderes de las manifestaciones en Georgia, el estado en el que nació. El jugador de 2,01 metros y un contrato garantizado de 115 millones de dólares hasta 2024 promovió y transmitió a través de sus redes sociales una marcha pacífica en Atlanta, la capital del estado, después de haber manejado 15 horas desde Boston, con una pancarta en su mano que decía "No puedo respirar", las últimas palabras que pronunció Floyd. 

 

"Ser una celebridad, ser un jugador de la NBA no me excluye de ninguna conversación. Primero y ante todo soy un hombre negro y soy miembro de esta comunidad. Estamos creando conciencia sobre algunas de las injusticias que hemos estado viendo. Nuestras voces tienen que ser escuchadas. Tengo 23 años. No sé todas las respuestas, pero siento cómo se sienten los demás", dijo el basquetbolista, que estuvo en la marcha junto a Malcolm Brogdon, jugador de Indiana Pacers, y Justin Anderson, que hasta el año pasado militaba en los Atlanta Hawks.

Brogdon, por su parte recordó sus orígenes. "Tengo un abuelo que marchó junto al Doctor Martin Luther King en los años 60. Él fue un ser increíble y estaría orgulloso de vernos a todos aquí", expresó el escolta de los Pacers. 

Kareem Abdul Jabbar, una de las máximas leyendas de la competencia, también dejó en claro su apoyo a las manifestaciones. "¿No entiendes las protestas? Lo que estás viendo es gente llevada al limite?", expresó el célebre ex jugador de 73 años en una columna publicada en el diario Los Angeles Times. "El racismo en América es como polvo en el aire. No se ve, aunque te esté asfixiando", graficó el máximo anotador de la historia de la NBA.

De las manifestaciones en Los Angeles participó el pivot Sam Clancy, jugador de Instituto de Córdoba en la Liga Nacional. Cuando se decretó la suspensión de la LNB por la pandemia, el "Jefe" regresó a Estados Unidos junto a su mujer y su hija. Por eso, no dudó en sumarse a las protestas. "Es triste que esta sea mi primera publicación de Instagram. Es hora de poner fin a la brutalidad policial", escribió el basquetbolista en las redes sociales, además de subir un video con imágenes de la manifestación por las calles de Los Angeles.

 

En la Bundesliga, el asesinato de Floyd tampoco pasó inadvertido, y las muestras de dolor y pedido de justicia también se hicieron sentir. El sábado había sido el capitán del Schalke, el estadounidense Weston McKennie, que utilizó la banda en su brazo para pedir justicia. Y este domingo se sumaron el francés Marcus Thuram, el británico Jadon Sancho y el marroquí Achraf Hakimi.

Thuram, hijo del ex lateral Liliam Thuram, campeón del mundo en 1998, anotó un doblete en la goleada del Borussia Moenchengladbach 4-1 sobre el Union Berlín y lo celebró con una rodilla en tierra, de la manera en la que el mariscal de campo Colin Kaepernick protestaba en 2016 por la violencia policial contra los ciudadanos afroamericanos y que volvió a hacerse viral por la manera en la que el policía Derek Chauvin asfixió a Floyd hasta provocarle la muerte.

 

Thuram padre fue un ferviente luchador contra el racismo en su época de jugador, e incluso activó una fundación para pelear contra ese flagelo. Incluso, se negó a ser traspasado a la Lazio con un un fuerte argumento: "No juego para fascistas". Y además, bautizó a su hijo con el nombre de Marcus en honor a Marcus Garvey, un conocido activista por los derechos de las minorías. Por eso, el gesto de su hijo, que podría exponerse a una sanción porque la FIFA siempre está en contra de que los jugadores se manifiesten en temas políticos, no sorprendió.

En el otro partido del domingo en el fútbol alemán, también tomó protagonismo el recuerdo de Floyd. Jadon Sancho, una de las jóvenes estrellas del Borussia Dortmund, mostró una camiseta con la leyenda "Justicia por George Floyd" en cada uno de los tres goles con los que su equipo venció 6-1 al Paderborn. 

El inglés Jadon Sancho mostró su camiseta con un mensaje que recorre el mundo. (AFP)

Su compañero marroquí Achref Hakimi, que anotó el cuarto gol del Dortmund, mostró una casaca similar y luego elevó sus brazos en cruz por encima de su cabeza en señal de homenaje. "Todos juntos venceremos al racismo!", escribió luego en sus redes sociales, para dejar bien claro su mensaje.