El candidato demócrata a la Casa Blanca Joe Biden acusó al presidente Donald Trump de transformar Estados Unidos en un campo de batalla. Además consideró que la muerte de George Floyd, el afroamericano de 46 años asesinado por la policía, fue un electrochoque para el país. “Buscaré sanar las heridas raciales que desde hace mucho tiempo gangrenan a este país en lugar de utilizarlas para sacar ventaja política", dijo el excompañero de Barack Obama en la presidencia. Biden hizo referencia directa a la represión policial del lunes frente a la Casa Blanca que le permitió a Trump llegar caminando a una iglesia . También llamó a la calma y pidió poner fin a la violencia.
Divide y reinarás
Biden condenó reiteradamente los incidentes desatados tras la muerte de Floyd pero acusó a Trump de fomentar la violencia. "Creo que la división lo ayuda", sostuvo el candidato demócrata, en relación a las elecciones presidenciales del 3 de noviembre. Sin embargo, según las encuestas Biden supera a su rival. "Cuando el presidente ordena desalojar a manifestantes pacíficos del porche de la casa del pueblo, la Casa Blanca, con gases lacrimógenos y granadas aturdidoras (...) tenemos derecho a pensar que el presidente está más preocupado por el poder que por los principios", dijo el exvicepresidente. El candidato subrayó que Trump está más interesado en alimentar las pasiones de sus bases que las necesidades de aquellos a quienes se supone debe cuidar. "Pero les prometo esto. No manipularé el miedo y la división. No atizaré las brasas del odio”, agregó Biden, de 77 años.
El candidato demócrata hizo referencia a la represión policial de la noche del lunes frente a la Casa Blanca. Allí las fuerzas de seguridad dispersaron violentamente a centenares de personas que protestaban pacíficamente en la Plaza Lafayette, frente a la residencia del presidente. El accionar policial tuvo un objetivo: mostrar a Trump caminando cerca de la Casa Blanca acompañado por miembros de su gobierno. Así cruzó la plaza entre dos filas de soldados y policías. Luego, el presidente llegó a la iglesia de St. John dañada en disturbios de la noche anterior. Levantó una Biblia con su mano derecha y dijo que Estados Unidos era el mejor país del mundo. Después advirtió que usaría la fuerza militar para detener las protestas. También durante la jornada del lunes Trump anunció que desplegaría miles y miles de soldados fuertemente armados en Washington. Además amenazó que donde hubiera protestas iba a desplegar el ejército para arreglar rápidamente el problema.
Llamada de atención
Biden dijo que un presidente debía cuidar a todo su pueblo, no sólo a los que lo votan o aportan para su campaña. “El presidente sostuvo la Biblia en la puerta de la Iglesia St. John ayer. Yo solo desearía que la abriese de vez en cuando, en vez de blandirla", manifestó el candidato demócrata. Además apeló a las últimas palabras de Floyd para hablar del racismo existente en EEUU. "No puedo respirar. No puedo respirar. (…) Esas palabras no murieron con él. Se escuchan todavía. Resuenan en todo el país. Esas palabras hablan a una nación donde demasiado a menudo el color de tu piel pone en peligro tu vida", remarcó Biden. El exvicepresidente de EEUU acompañó a Obama en sus dos períodos presidenciales (2009-2017). Desde ese momento quedó muy ligado a lucha por los derechos de la comunidad negra en su país.
Ante el avance del coronavirus en EEUU, Biden criticó a Trump por la administración de la pandemia. “Cien mil personas perdieron la vida por un virus y 40 millones de personas perdieron su empleo, con un número desproporcionado de esas muertes y esos despidos concentrados en las comunidades negras y de minorías”, sostuvo el candidato. Además señaló que la muerte de Floyd puso en evidencia que el racismo es algo que sufren millones de personas todos los días. “Es una llamada de atención a nuestro país, desde mi punto de vista, para todos nosotros. Y digo a todos”, enfatizó el exvicepresidente.