El diputado provincial Gustavo Orozco, del bloque Justicialista Gustavo Sáenz Conducción, y ocho policías llegan a juicio imputados por vejaciones agravadas por el uso de la violencia, severidades, torturas, privación ilegítima de la libertad y apremios ilegales. Los delitos se habrían cometido cuando el legislador se desempeñaba en Rosario de la Frontera y era Jefe de la Brigada de Investigaciones de la Policía de Salta en Metán.

Ayer, en la sesión de la Cámara de Diputados Orozco dijo que pedirá licencia desde el 17 de junio hasta que termine el juicio. "Quiero ir a cara limpia como soy yo, sin fueros. No soy un delincuente, aquellos que lo son piensan que todos somos de su condición, están equivocados", afirmó.

El legislador se refirió a los denunciantes. "Les recuerdo que uno está preso por violación; otro, por homicidio; otro que tenía un sinfín de causas volvió a caer preso por robar en la sociedad rosarina, esas son las personas que nos acusan", sostuvo. 

La audiencia de debate que llevará adelante la jueza Carolina Poma Salvadores, de la Sala II del Tribunal de Juicio Unipersonal, se desarrollará el 17, 22, 25 y 30 de junio, a partir de las 9.30 en Metán. El Ministerio Público Fiscal estará representado por el fiscal de Rosario de la Frontera, Oscar López Ibarra. De acuerdo a la información que se brindó, el debate será presencial, sin embargo, el Poder Judicial de Salta no informó si se permitirá la presencia del público y la prensa. La aclaración es necesaria porque en la ciudad de Salta no se permite el acceso del público debido a las restricciones por la pandemia del coronavirus. 

Los policías imputados son Víctor Orellana, Andrés Suárez, Javier Reynoso, Denis Coronel, Rubén Medina, Andrea Díaz, Víctor Díaz y Dardo Pérez, por "vejaciones agravadas por el uso de la violencia, severidades, torturas, privación ilegítima de la libertad y apremios ilegales”. 

El inicio de la audiencia de debate estaba previsto para el 27 de marzo pasado, pero se suspendió ante la declaración de la feria extraordinaria, dictada a raíz de la emergencia sanitaria por la pandemia de la Covid-19. 

Orozco explicó que la audiencia oral se venía suspendiendo y que espera que eso no vuelva a pasar. "Es un juicio que con mis letrados veníamos pidiendo que se hiciera y que no se postergara la fecha porque me perjudicaba y me sigue perjudicando. Es la única forma que tengo de demostrarle a la sociedad salteña que he trabajado como correspondía y que hice bien las cosas", manifestó.  

El diputado y los ocho policías llegan a juicio por las denuncias de detenidos en tres causas judiciales. 

Francisco Reynaldo Diaz es uno de los denunciantes, "dice que cuando se lo detiene se lo trata mal, y por una privación ilegítima de la libertad. Habíamos consultado con el fiscal Oscar López Ibarra, quien solicitó la detención y un juez la ordena. Era una causa de robo calificado", explicó Orozco. En ese entonces el ahora legislador  y los otros policías de la Brigada de Investigaciones fueron detenidos, en principio un día y luego cuatro meses, cuando se sumaron denuncias de otros presos.

Díaz relató el año pasado al diario El Tribuno que cuando lo detuvieron estaba junto a su hijo menor de edad y que los policías luego de maltratar a este chico lo enviaron a la comisaría y se quedaron a solas con él. Allí -según Díaz- lo esposaron, le pusieron encima tres gomas de tractor "para que se ablande" y luego lo golpearon. 

Dijo que después lo llevaron a la sede de la Brigada de Investigaciones donde lo torturaron para que se hiciera cargo de la tenencia de una pistola vinculada a otro caso. Ante su negativa, el denunciante sostuvo que fue sometido nuevamente a torturas. Fue trasladado horas después como detenido a Metán, el hombre aseguró que el juez que lo vio ordenó una revisión médica y determinó los vejamenes sufridos. Aún así permaneció meses privado de su libertad, hasta ser absuelto.

Orozco contó que cuando estuvo detenido, lo denunció otro hombre que había cometido una violación en Arroyo San Martín y ya llevaba dos años cumpliendo condena. 

Otra de las causas se relaciona con los detenidos por el homicidio de Martín López en 2016. "A un hombre de 65 años lo habían matado a golpes en la cabeza. Detuvimos a dos personas que después nos denunciaron y dicen que sufrieron maltrato al momento de la detención", sostuvo Orozco.