Transcurría la presentación de los resultados de una evaluación que hizo el Gobierno sobre la educación, cuando el presidente Mauricio Macri se salió del libreto y dijo: “Esto marca un problema de fondo: la terrible inequidad entre aquel que puede ir a una escuela privada versus aquel que tiene que caer en la escuela pública”. El uso del verbo “caer” generó una polémica que involucró a los opositores, los sindicatos docentes y que repercutió en las redes sociales con cientos de personas indicando su pertenencia a la educación pública. El Gobierno buscaba impactar con los resultados de las pruebas y responsabilizar a los gremios de “destruir la educación pública”. En vez de eso, el Presidente fue cuestionado por sus prejuicios sobre el sistema educativo público, que la mayoría de su gabinete jamás pisó.
La estrategia venía siendo adelantada desde hace días: Macri buscaba presentar los resultados del Plan Aprender en medio del conflicto docente que ya lleva tres semanas, a un día de la Marcha Federal Docente y cuando le exigen que respete la ley y convoque a la paritaria nacional. El Gobierno buscaba contraponer las demandas salariales a los resultados de la evaluación. No obstante, el desliz en el discurso terminó exponiéndolo a las críticas.
Tropezón y caída
En la presentación del Plan Maestro, Macri sostuvo que el resultado de las pruebas que le hicieron a un millón 400 mil estudiantes “es doloroso”. Indicó que hay un nivel muy bajo en lengua y matemática para los alumnos secundarios. Sostuvo que 7 de cada 10 estudiantes que egresan del secundario mostraron por debajo del margen en matemática, mientras que el 46,4 por ciento tuvo calificaciones por debajo de lo básico en lengua. Además, indicó que hay una brecha entre la educación pública y la privada:
“Es increíble que cinco de cada diez chicos no comprendan un texto en la escuela pública. En la escuela privada, son dos de cada diez”, afirmó Macri, quien se mostró sorprendido pese a que su gobierno viene filtrando hace días los resultados de los exámenes a través de los medios afines.
Luego vino la frase que coronó con los que “tienen que caer” en la escuela pública. Fue pronunciada por el Presidente cuando enfrenta el principal conflicto docente de su mandato. Lo acompañaba en la Quinta de Olivos el ministro de Educación, Esteban Bullrich, que tiene en común con Macri (y con buena parte del gabinete) provenir de la educación privada y enviar a sus hijos a escuelas privadas. La posición entre educación pública y privada se ve reforzada por los datos de los años en los que Macri fue jefe de Gobierno, en los que se subejecutaron las partidas destinadas a la educación pública a la par de que crecían las que iban a subsidiar la privada. La participación del presupuesto educativo sobre el total en la Ciudad cayó siete puntos durante la gestión de Macri. Con su llegada a la Nación, se multiplicaron las denuncias por despidos en el Ministerio de Educación y cierres de programas, lo que llevó a comienzos de este año a la ocupación del ministerio y la represión de sus trabajadores.
Caen críticas
Tras la frase de Macri, hubo un rechazo masivo de los distintos sectores de la oposición, los gremios docentes y ciudadanos en general, que se expresaron en las redes sociales. La secretaria general de Ctera, Sonia Alesso, afirmó a este diario: “Me parece que cada una de las cosas que ellos han hecho tiene que ver con una decisión clara de enfrentar a los maestros, y además de desprestigiar la educación en la Argentina. El Presidente lo dice con todas las letras, porque afirma que `caen en la escuela publica’. La verdad, es grave. La realidad contradice lo que ellos están diciendo. Los grandes pensadores de la Argentina, los grandes investigadores, ¿donde estudiaron? No estudiaron en el Newman”.
Desde el Suteba, la secretaria de Educación y Cultura, Silvia Almazán, consideró que “es una desvalorización de la escuela pública y también de los trabajos y los proyectos que estamos desarrollando”. También advirtió que estaban analizando cómo se construyó el Plan Aprender, porque “los parámetros que se utilizaron podrían haber sido arbitrarios, en tanto algunos ejercicios tenían más valor que otros”. Almazán advirtió que esta frase del Presidente “se inscribe en un discurso de deslegitimación de la escuela pública”.
La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner publicó un emoticón de vergüenza junto con la frase de Macri y luego posteó una foto de un libro de Mario Benedetti con las siguientes líneas subrayadas: “El sistema es sencillo. Por ejemplo, quitémosle fondos a la Universidad de la República, y cuando esta empiece a ahogarse (...) señalemos entonces qué ineficaz se ha vuelto la educación pública, aún la superior, y destaquemos una vez más que la solución es la Universidad privada, donde no se producen huelgas y hasta hay una cierta facilidad para titularse”.
Por su parte, el diputado del Frente Renovador Felipe Solá tuiteó: “¿Caer en la escuela pública? El acceso a la educación es un derecho que el Estado debe asegurar, Macri, no es una opción”.
“Es indisimulable la actitud del Gobierno en contra del Estado, de los trabajadores y del pueblo. Tomaron algunos módulos de educación para que les diera decididamente mal. Macri no comete un furcio cuando dice que tiene que caer en la escuela pública. Es lo que piensa. Es el desdén que tiene respecto del Estado”, advirtió el ex ministro de Educación Alberto Sileoni. “Construyen este diagnóstico para tomar decisiones dolorosas. Si tanto le preocupa la educación pública, ¿por qué discontinuaron los programas de capacitación? ¿por qué los chicos se quedaron esperando una netbook que nunca les llegó? ¿por qué no distribuyeron libros? ¿por qué desarman el Plan Fines, el Plan de Educación Sexual Integral?”, se preguntó.
El dirigente del Partido Solidario Carlos Heller indicó: “Nos toca defender la escuela pública, frente a una nueva embestida del Presidente Macri, que de modo cotidiano intenta avanzar en el vaciamiento del Estado y plantea caminos privatizadores”. “Nunca cayó tanto la educación pública como desde que cayó Mauricio Macri. El primer objetivo que tiene es destruir la paritaria nacional. El segundo objetivo es que la educación deje de formar personas críticas y que pase a formar chicos productivos. Se busca desmembrar nuevamente el sistema nacional y dejar desigualada la educación entre los pobres y los más ricos”, advirtió el ex ministro de Educación Daniel Filmus.
La dirigente del PTS, Myriam Bregman, advirtió que “Macri habló de los que tienen que ‘caer’ en la escuela pública. Es humillante. Nos agravia a todos”. En tanto, Alcira Argumedo, de Proyecto Sur, indicó: “‘Los que tienen que caer en la escuela pública’ dice el egresado del Newman y la UCA que no sabe cuánto cobra ni un jubilado ni un maestro”.