Obreros despedidos durante la pandemia protestan frente a las oficinas de la minera Mansfield por la devolución de sus puestos de trabajo y pago de horas adeudadas. Cortaron media calzada en la Avenida Reyes Católicos al 1224. Uno de ellos se encadenó y dijo que comenzará una huelga de hambre y la Policía impidió que armen carpas.
Los trabajadores estaban contratados por Electrificadora del Valle EDVSA para realizar la construcción de la planta que extraerá oro en el marco del proyecto Lindero. En marzo luego del decreto nacional de aislamiento social, preventivo y obligatorio por Covid-19 siguieron cumpliendo tareas durante una semana y media. Después, algunos tenían franco mientras otros fueron enviados a sus hogares. Estando en sus casas recibieron notificaciones de suspensiones y luego más de 250 empleados fueron notificados de sus despidos por Whatsapp.
Lindero es un proyecto minero a cielo abierto del que se extraerá oro. El yacimiento está ubicado al sur del Salar de Arizaro, a unos 75 kilómetros de la localidad de Tolar Grande, en el departamento Los Andes. Está emplazado a una altura entre los 3700 y 3990 metros sobre el nivel del mar, dentro de la región de la Puna.
El obrero Javier Caden, de Salta Capital, es uno de los despedidos. Explicó que su puesto era el de amolador de soldadores combinados y de cañistas, una especialidad dentro de las tareas de construcción industrial. Tiene 37 años y 3 hijos que mantener. Fue contratado por EDVSA y trabajó 8 meses en Mansfield.
"No recibimos una indemnización, nos deben muchas horas extras. Mi despido fue el 10 de marzo, estuve de franco y me mandaron un whatsapp diciendo que estaba desafectado de la empresa. Nos deben los días de franco porque trabajamos en rotaciones de 21 días por 7 de descanso. En días de descanso se reconocen 8 horas laborales, eso no nos pagaron", sostuvo a Salta/12.
Además el trabajador indicó que la empresa no les dio la baja en la AFIP por lo que siguen figurando como "activos" y no han podido cobrar ayudas sociales como la del Ingreso Familiar de Emergencia dispuesto por el gobierno nacional, tampoco el salario universal y muchos siguen sin cobrar el seguro de desempleo.
"Como trabajadores de la construcción sabemos que esta obra tenía una fecha de inicio y una de finalización. La planta no está construida ni siquiera al 60% todavía", indicó Caden. El obrero dijo que al terminar el contrato con EDVSA, Mansfield comenzó a trabajar con otras cuatro empresas constructoras.
Otros trabajadores manifestaron que presentaron el currículum para trabajar con algunas de las empresas de construcción como PM y Nor Trading que prestan servicios en Mansfield, y que luego de haberlos aceptado, y de que se hicieran el hisopado, los rechazaron a último momento. Consideran que hay una persecución laboral de Mansfield por el reclamo iniciado y que por ello no los vuelven a tomar para trabajar ahí con otra contratista.
En la mañana, alrededor de las 10, los trabajadores se dirigieron al gremio de la UOCRA para hablar con el secretario general, Ruben Aguilar. Caden expresó que quedaron disconformes con las respuestas del gremialista quien les dijo que "no ejercen presión contra las empresas".
El obrero enfatizó que el rol del sindicato debería ser el de brindar respaldo a los trabajadores pero que en este caso UOCRA no los acompaña en la protesta y no se sienten representados.
"Estamos haciendo esta movilización a pulmón, poniendo lo poco que nos queda de nuestro bolsillo. Hicimos una vaquita para que nuestros compañeros del interior puedan venir. Los trabajadores salteños con nuestro sindicato estamos sufriendo mucho", manifestó Caden. Añadió un pedido público a Aguilar para que "tome cartas en el asunto". Otro planteo es que no se sienten representados por el gremio en las audiencias de conciliación con EDVSA y Mansfield en la Secretaría de Trabajo.
Los obreros también realizan un pedido de intervención al gobernador Gustavo Sáenz. "Queremos que se cree una bolsa de trabajo. Necesitamos trabajar. Si no se puede acá, que sea en otra obra", solicitó Caden. El obrero añadió que están "desamparados por el gobierno de Salta y por el sindicato UOCRA".
Indicó que hay más de 250 familias que quedaron en la calle. Señaló que Lindero es una planta de extracción de oro, que va a dejar "el tendal en Tolar Grande y toda esa zona de la Puna por la contaminación. Es minería a cielo abierto y se trabaja con cianuro". Además de generar consecuencias ambientales, "las empresas como Mansfield se llevan toda nuestra materia prima al exterior y nosotros no podemos gozar de los beneficios, ni siquiera de trabajar", manifestó.
Los obreros están sin trabajo hace tres meses. Caden dijo que recién hace una semana pudo cobrar el seguro de desempleo pero que es un monto efímero comparado con el que era su salario.
El obrero Ramiro Frías, de 42 años, viajó desde Orán. Decidió encadenarse y manifestó que iniciará una huelga de hambre. Sostuvo que seguirán frente a la empresa Mansfield hasta que haya una solución.
"Detrás de cada trabajador hay una familia. Pedimos a Mansfield como dueños de la minera y responsables solidarios que se hagan cargo de nosotros. Somos 250 trabajadores pero además hay otros compañeros que estaban con la empresa GMR, subcontratada por EDVSA que también han sido despedidos. Con ellos somos más de 300 personas", detalló Frías. También indicó que entre los despidos, 5 serían de mujeres.
El trabajador oranense contó que sigue sin cobrar el seguro de desempleo. Después de su despido en marzo, el 2 de junio le enviaron los papeles para cobrar el fondo pero el banco no se los aceptó porque estaban escaneados y no eran originales. Frías quedó también sin obra social y su esposa tiene un embarazo de riesgo de 7 meses en el que necesita atención médica.
El obrero José Pérez tiene 35 años, es oficial montador y viajó desde General Güemes, Trabajó 7 meses en Mansfield. Dijo que estuvo trabajando hasta una semana y media después del decreto de cuarentena obligatoria y que lo hicieron bajar luego. Recibió una notificación de suspensión y luego de despido por Whatsapp. El 18 de abril cobró la liquidación pero dijo que no le pagaron la quincena de marzo. También aseveró que les pagaron 5 de 12 horas diarias laborales. Consideró que la liquidación se hizo mal.
Pérez tiene dos hijas pequeñas, no puede cobrar el salario universal. Sostuvo que en Güemes no hay trabajo y que con la pandemia la situación empeoró. Contó que en su hogar tratan de hacer gastos mínimos para sobrevivir ante el despido y que como otros trabajadores tienen que pedir "plata prestada". "Esperamos que nos devuelvan los puestos de trabajo", manifestó el obrero. "El gobernador tendría que hacerse eco de lo que está pasando", dijo.
El gerente de Relaciones Institucionales de Mansfield, Facundo Huidobro, aseguró que la minera cumplió con todas las obligaciones respecto al pago de la empresa contratista EDVSA y que ya había culminado el tiempo de contratación. Dijo que no está al tanto del reclamo específico de la liquidación mal realizada de horas laborales que reclaman los trabajadores. "Mansfield no se va a desentender de ningún tipo de reclamo. Es lamentable lo que ocurre con los trabajadores. Normalmente se espera que cuando un contratista termina su obra todos sus empleados estén perfectamente liquidados. Estamos en conciliación en la Secretaría de Trabajo, se le ha pedido a EDVSA que presente toda la documentación para ver cuál es la situación", sostuvo.
Huidobro negó que exista una persecución sobre los obreros que eran de EDVSA, también planteó que no los pueden absorber. Aseguró que la construcción estaría finalizando en 3 o 4 meses y que están capacitando a trabajadores con otros perfiles para la etapa de operación. Las autoridades de Mansfield no atendieron en la jornada del miércoles a los trabajadores.