El pedido de aumento del 30% en el sueldo de los municipales de General Güemes de la provincia de Salta obtuvo un giro favorable para los trabajadores, por ahora el incremento será del 20% hasta noviembre de este año. El 30 de junio, los gremios y las autoridades se volverán a reunir para tratar despidos ocurridos en la nueva gestión, cambios en los cargos de función y el pase de planilleros a contratados.
“No se llegó a un acuerdo del 100%, sino que es un acuerdo parcial”, contó a Salta/12 la delegada de la Asociación de empleados municipales de Salta (Ademus) por General Güemes, Mariela Vallejos. El acuerdo se dio en el marco del reinicio de las audiencias de conciliación obligatoria entre los empleados municipales y el gobierno de Sergio Salvatierra. Ambas partes habían sido notificadas por la Secretaría de Trabajo de la Provincia en marzo pero el proceso quedó en suspenso por la cuarentena obligatoria en prevención del coronavirus.
Con la vuelta a las actividades, las audiencias pudieron realizarse y en la segunda, que se llevó a cabo en la ciudad de Salta, el intendente informó sobre los conflictos económicos y financieros que atraviesa el municipio; advirtió “que su prioridad es el bienestar de los trabajadores” por lo que se encuentra realizando las gestiones “pertinentes a fin de obtener recursos para afrontar las obligaciones respecto a las necesidades de los municipales”, según se hizo constar en el acta final del acuerdo.
A pesar de que los municipales pedían una mejora del 30%, el acuerdo final concluyó con un incremento salarial del 20%. Este se abonará gradualmente, comenzando con un 5% en junio, y luego se abonará en cinco cuotas del 3% con los sueldos de julio, agosto, septiembre, octubre y noviembre. Para la liquidación se tomará como base de cálculo el sueldo de febrero de 2020 como se viene haciendo actualmente.
Según lo pactado, el aumento es de carácter no remunerativo, con excepción de quienes se encuentran próximos a jubilarse. Además, el incremento solo será otorgado al personal de planta permanente y contratados, dejando por fuera a secretarios, directores y concejales.
El reclamo se basó en que el gobierno provincial acordó en la segunda semana de marzo un incremento paulatino del 30% desde febrero. En ese caso, las autoridades municipales decidían si adherir o no. Y en ese mismo acuerdo provincial también se había fijado un bono de $2000. En cuanto a esto el Ejecutivo de Güemes informó que aún “continua vigente la posibilidad de cobrarlos en órdenes de compra”.
Esta modalidad viene a cuenta de acuerdos que realizaron desde el actual gobierno con empresarios del lugar dado que, como dijo Salvatierra en la audiencia, la recaudación propia del municipio mermó desde el inicio de la cuarentena. También, la Municipalidad liquidará las asignaciones familiares a los valores de la provincia.
En lo firmado por el intendente y los gremios de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), la Unión de Personal Civil de la Nación (UPCN), el Sindicato de Obreros y Empleados municipales (Soem) y el propio Ademus, también se pactó mantener reuniones periódicas.
La próxima será el 30 de junio a las 19 en el edificio municipal. Será para tratar otros reclamos que elevaron los trabajadores y que refieren a despidos desde que asumió el actual intendente, el cambio de funciones en el municipio y el pase de “planilleros” a contratados. En este último punto, los gremios notificaron que se trata de más de 100 personas que bajo ese carácter se encuentran precarizados desde la gestión anterior.
“No estamos contentos con el aumento, pero hasta ahora tenemos eso”, advirtió Vallejos. Sostuvo que se mantendrán en alerta y que ante cualquier incumplimiento, además de notificar a la Secretaría de Trabajo, “los compañeros están dispuestos a seguir en las calles si esto no se soluciona”.
A pesar de que los trabajadores estaban en conciliación obligatoria, es decir, estaban impedidos de realizar manifestaciones hasta no concretarse las audiencias, en la cuarentena se manifestaron y realizaron cortes de la ruta nacional 34, ollas populares y asambleas. Recién el 5 de junio, Trabajo retomó el proceso y llamó a las partes a su primera reunión de conciliación.