El ministro de Transporte, Mario Meoni, confirmó que el gobierno nacional hará esfuerzos para que Latam siga operando en el país y anticipó que, en ese sentido, mañana se reunirá mañana con los directivos de esa empresa aérea a fin de encontrar una salida a la crisis que atraviesa producto de la pandemia de coronavirus.
”Esperamos encontrar un camino que permita que Latam pueda seguir operando en la Argentina y que los trabajadores no pierdan su fuentes de trabajo", remarcó el funcionario en una entrevista radial durante la cual informó, además, que el Ministerio de Trabajo aún debe emitir un dictamen al respecto tras el anuncio de la empresa.
Además, resaltó que la intención oficial es "que todas las empresas trabajen para que la gente mantenga su empleo, sobre todo en un momento tan crítico como el que vivimos. Necesitamos a las empresas trabajando, no cerradas".
La reacción del gobierno de Alberto Fernández surgió horas después de que la línea aérea anunciara a través de un comunicado su decisión de dejar de operar en el país.
"El impacto que han tenido en Latam Airlines Argentina la pandemia COVID-19 y la dificultad de generar los múltiples acuerdos necesarios para enfrentar la situación actual contribuye a configurar un escenario en extremo complejo, en el que no están dadas las condiciones para viabilizar y sostener a largo plazo las operaciones de la filial", indicó la compañía.
Meoni reveló que desde el gobierno nacional "sabíamos que podía pasar ésto” ya que la empresa venía arrastrando “una situación” compleja desde hace dos años, mucho antes de que se desatara el virus que puso en jaque a la economía mundial.
“En 2018 (Latam) perdió 132 millones de dólares mientras que en 2019 perdió otros 133 millones", precisó el funcionario y explicó que el impacto de la pandemia fue "paralizar todas las actividades aeronáuticas en el mundo, no sólo en la Argentina”.
El funcionario insistió que la situación de la empresa no es producto de la coyuntura argentina sino consecuencia de la crisis económica internacional. Indicó que Latam “venía sustituyendo sus pérdidas con refuerzos de capital por parte de sus accionistas internacionales" y afirmó que sus accionistas están “en un proceso de convocatoria en Estados Unidos para readecuar el repago de sus deudas”, y que por ello “han hecho un nuevo esquema de operaciones”.
En este marco, prosiguió, “como los vuelos de cabotaje en la Argentina no les significaba un impacto importante, decidieron suspenderlos", y aclaró que la suspensión de los vuelos internos "significa que no pierden rutas y que pueden volver a operar en cualquier momento".