En medio de la crisis por el coronavirus, el mercado de motos vive un “veranito” en las ventas. Los patentamientos repuntaron en lo que va de junio, y desde el sector tienen expectativas positivas. En las motos de gama baja y media, el aumento de la demanda se debe a la búsqueda de una movilidad alternativa al transporte público. En las de gama alta, ocurre que el precio en dólares se redujo a la mitad, debido a que el consumidor la paga en pesos, pero vende las divisas en el mercado blue, donde el dólar cotiza arriba de los 120 pesos.

Las cifras de mayo no fueron del todo alentadoras. El patentamiento alcanzó las 16.187 unidades, una caída interanual de 38,7 por ciento, según la Asociación de Concesionarios (Acara). Por el contrario, en los primeros 10 días de junio hubo 9009 patentamientos, un 83 por ciento superior al de mayo, respecto al mismo período, aunque sigue significando una caída del 12,3 por ciento con respecto al año anterior, de acuerdo a las cifras parciales de Acara.

“Estos indicadores son un signo claro de recuperación”, afirmó Carlos Movio, director institucional de Acara. En diálogo con PáginaI12, Movio detalló las causas de esta mejora: “Primero debido a la apertura de los salones de venta en casi todo el país. Segundo porque había una demanda contenida de cuando los concesionarios estuvieron cerrados. Y tercero por el lugar que tiene la moto como alternativa al transporte público”.

Ventas

El grueso de las ventas se concentra en las unidades de baja cilindrada. Es habitual que encabecen los ránkings de las más vendidas. Pero también puede influir otro factor por la pandemia. “Hay mucha necesidad de trabajo, y algunos se vuelvan a la moto en función de los deliveries”, afirmó Movio. Además, destacó la importancia de los programas de financiamiento como Ahora 12 y Ahora 18, vigentes desde abril. 

Lino Stefanuto, presidente de la Cámara de Fabricantes de Motos (Cafam), sumó como otro factor la brecha entre el dólar oficial, a 70 pesos, y el blue, a más de 120 pesos. “Con 400 dólares blue una persona se puede comprar una moto, es más barato que un celular”, opinó. De hecho, tres de las cinco motos más vendidas en mayo (Gilera Smash 110, Motomel B110 y Keller KN110-8) cuestan menos de 50 mil pesos, es decir, menos de 400 dólares al tipo de cambio paralelo.

Pero donde más influye esta brecha en el tipo de cambio es en las motos de gama alta, donde se vive una situación inédita. “No damos a basto con las entregas, los operarios están trabajando hasta los fines de semana y vamos a tomar gente para la fábrica”, contaron desde una de las terminales. De hecho, los datos de los concesionarios muestran caída en las ventas de motos en mayo. Pero, desagregado por marca, las premium muestran subas. Por ejemplo, KTM aumentó las ventas un 25 por ciento y la participación en el mercado se duplicó. Una KTM 790 que cuesta 25 mil dólares, los concesionarios la venden en pesos al tipo de cambio del día del Banco Nación. Por la brecha, al consumidor le cuesta 40 por ciento menos en dólares, por lo que debe desembolsar 10 mil dólares menos.

Expectativas

¿Hasta cuándo se puede sostener el “veranito”? Los fabricantes y los concesionarios apuntan a dos factores: el financiamiento y el stock. El Ministerio de Desarrollo Productivo y el sector de motos avanzaron en el desarrollo de un plan de financiamiento de 36 cuotas y una tasa subsidiada del 16 por ciento anual, para motos menores a 150 mil pesos, por lo que la cuota mensual sería alrededor de 4000 por mes. El objetivo es vender 45 mil motos para descongestionar el transporte. Sin embargo, el plan quedó paralizado desde hace 3 semanas.

El otro factor tiene que ver con el stock para los próximos meses. “Hay algunos pedidos con licencias no automáticas que se aprueban a cuenta gotas, sobre todo motos armadas. Menos problemas tienen quienes las ensamblan acá y fabrican partes nacionales”, aseguró Stefanuto. Este viernes habrá una reunión entre la subsecretaria de industria, Julieta Lousteau, y las cámaras para dirimir estas dos cuestiones.