El secretario de Cultura de Pinamar, Eduardo Isach Haddad, compartió el miércoles pasado en su cuenta de la red social TikTok un video que despertó numerosos repudios y lo obligó a pedir disculpas, además de esbozar una explicación al respecto que, de todos modos, no terminó de ser muy clara. En el polémico material --de un minuto de duración--, el funcionario del gobierno encabezado por el intendente Martín Yeza imita en un supuesto tono humorístico a una mujer que conversa con otra y le cuenta que “están dando mercadería allá, dicen que la regalan”, aunque luego agrega un detalle: “dicen que le tenés que dar un besito al señor y te da cinco bolsones”. La “escena” parece contextualizada en un kiosco o despensa, ya que la mujer representaba por Isach toca un timbre varias veces para ser atendida y luego pide que le vendan una gaseosa. La conversación ficticia es intermediada por risas y de fondo se escucha la canción “Sentimiento villero”, del grupo de cumbia Pibes Chorros.
El problema es que, además del enunciado en sí mismo (donde se indica que para recibir la mercadería, presumiblemente de ayuda alimentaria, es necesario que la mujer se ponga “a disposición” del hombre que la entrega), Isach enfatiza rasgos, movimientos y términos propios del argot con una connotación estigmatizante y peyorativa, rozando la ridiculización. “Eh, amiga, ¿tanto la vas a soguear?”, “cerrá el orto, pedazo de pelotuda” o “la rechapié mal”, dice, por ejemplo, mientras acompaña las frases con exagerados movimientos de manos y boca. Lejos de significar una humorada, el video se termina convirtiendo en una burla sobre una situación cuestionable de abuso de poder en el contexto de la entrega de bolsones.
El video comenzó a circular en todo Pinamar y despertó encendidas reprobaciones desde distintos ámbitos. La Asociación de Profesionales y Técnicos de la Salud de Pinamar expresó su “absoluto repudio a la violencia de clase que mostró el funcionario municipal Eduardo Isach en sus redes sociales”, ya que “se ríe en primer lugar de una mujer, en segundo término vulnerable y al parecer de corta edad”, agregando que “instamos a todos en este contexto tan delicado a respetar los derechos de los y las ciudadanas, y a priorizar la atención de los más necesitados, pero especialmente a quienes ejercen cargos de poder a realizar su trabajo con responsabilidad política, social y moral”.
Por su parte, la organización social Atahualpa Pueblo Unido indicó: “A nosotrxs no nos parece gracioso tener que ir a mendigar una bolsa de mercadería. Exigimos que se tome con seriedad la situación económica y social que está viviendo nuestra ciudad. Dejemos de tomar estas cosas con humor. No es un simple Tik Tok. Esto es una falta de respeto hacia los vecinos y vecinas que la están pasando mal”. En ese sentido, la docente y escritora local Sheila Anzalone explicó que “los bolsones de alimentos (mercadería) no se regalan y no son ‘gratis’, sino que se se distribuyen en las escuelas y centros comunitarios con un control exhaustivo para evitar bribonadas varias”, además de resaltar que “si la distribución de ese servicio alimentario fuera aprovechada por abusadores de adolescentes pobres, eso, lejos de mover a risa, debería causar indignación y conducir a los funcionarios a tomar las medidas de protección necesarias, a sabiendas de que la trata y otras prácticas aberrantes merodean donde hay necesidades básicas insatisfechas”.
Recién cuando la bola ya había crecido demasiado, Isach dio de baja su cuenta de TikTok y publicó un tibio descargo en su cuenta de Facebook donde asegura que utilizó esa red social “de forma errática”, al mismo tiempo que arguye no haber tomado “conciencia de la sensibilidad del tema ni de sus consecuencias”. En ningún momento habla de sus burlas sobre situación de vulnerabilidad ni el refuerzo de estereotipos en el que incurrió su video. Curiosamente al final de la publicación, y solo a modo de posdata, indica que “si alguien tiene alguna necesidad o conoce vecinos que las tengan, déjenme un mensaje más abajo o llamen al 148”
No es la única red social en la Isach se expone a situaciones polémicas en relación a la pandemia, y fundamentalmente a su dudosa capacidad de análisis respecto a las consecuencias de la covid-19. En su cuenta de Twitter, por ejemplo, aparecen entre las últimas publicaciones el retuit de una imagen con la cara de Mauricio Macri y su cuestionada frase de que “más peligroso que el coronavirus es el populismo” indicando que “hay que recordarlo cada tanto”.